En plena crisis mundial de la finanzas, Argentina es formadora internacional de precios en soja y maíz. Además, se espera que Brasil reactive su economía y en nuestra “brasildependencia” el sector automotor tendrá mejoras para superar su desaceleración. Esa ventaja comparativa permitió que tres fuentes de datos económicas, corrijan los futuros comportamientos de las variables que más sensibilizan a la gente. Así es que el Banco Central, Indec y la consultora Bein, permiten inferir que los guarismos para 2013, tendrán pocas modificaciones en más o en menos. El desempleo actual de 6,8% bajaría a 6,5%, los salarios de 23,5% pueden bajar a 22,9%, los precios minoristas (impactan en la inflación) de 22,8% de suba quedarían en 22,9%, el dólar oficial cotizado en promedio $4,96% saltará a $5,85 y el dinero en préstamo que dispondrá la gente para proseguir el consumo crecerá de $363.000 millones a $ 457.300 millones. Si el desempleo baja, de acuerdo a estas cifras, podrá amortizar la leve caída del salario. Este sería el escenario para el bolsillo en el 2013, aunque el país seguirá acumulando dólares en el Central. Las reservas terminarían cerca de US$ 43.500 millones y el año próximo lleguen a US$ 45.000 millones. Las grandes cuentas (la macroeconomía) indica que Brasil sale de su lentificación económica y hará más compras. Ello mejorará el sector automotor y la cosecha que se exporta traerá más dólares. La conclusión entonces es que el país termine 2012 creciendo cerca del 5% . El 2013 será con desempleo casi estable y salarios que pierden, acaso, un punto en poder de compra.
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En plena crisis mundial de la finanzas, Argentina es formadora internacional de precios en soja y maíz. Además, se espera que Brasil reactive su economía y en nuestra “brasildependencia” el sector automotor tendrá mejoras para superar su desaceleración. Esa ventaja comparativa permitió que tres fuentes de datos económicas, corrijan los futuros comportamientos de las variables que más sensibilizan a la gente. Así es que el Banco Central, Indec y la consultora Bein, permiten inferir que los guarismos para 2013, tendrán pocas modificaciones en más o en menos. El desempleo actual de 6,8% bajaría a 6,5%, los salarios de 23,5% pueden bajar a 22,9%, los precios minoristas (impactan en la inflación) de 22,8% de suba quedarían en 22,9%, el dólar oficial cotizado en promedio $4,96% saltará a $5,85 y el dinero en préstamo que dispondrá la gente para proseguir el consumo crecerá de $363.000 millones a $ 457.300 millones. Si el desempleo baja, de acuerdo a estas cifras, podrá amortizar la leve caída del salario. Este sería el escenario para el bolsillo en el 2013, aunque el país seguirá acumulando dólares en el Central. Las reservas terminarían cerca de US$ 43.500 millones y el año próximo lleguen a US$ 45.000 millones. Las grandes cuentas (la macroeconomía) indica que Brasil sale de su lentificación económica y hará más compras. Ello mejorará el sector automotor y la cosecha que se exporta traerá más dólares. La conclusión entonces es que el país termine 2012 creciendo cerca del 5% . El 2013 será con desempleo casi estable y salarios que pierden, acaso, un punto en poder de compra.