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Después de protagonizar el partido más largo en la historia del tenis olímpico contra Roger Federer, Juan Martín del Potro se quedó con la primera medalla de la delegación argentina. Superó en la final por el bronce al número dos del tenis mundial, el serbio Novak Djokovic, por 7 a 5 y 6 a 4, en Wimbledon.
La incertidumbre inicial se apoderaba de los argentinos por saber si el tandilense superaría la dura derrota ante el gran Roger, del viernes pasado en semifinales (el tercer set perdió Del Potro por 19 a 17). Sin embargo, en una hora y 48 minutos la Torre mostró una vez más el gran nivel que viene teniendo y justificó una gran victoria.
El serbio arrancó haciendo pesar la potencia de su derecha cruzada y el tandilense no pudo seguirle el ritmo. Primer juego en cero para el serbio. Del Potro apareció en el segundo game, cuando, con un “passing” cruzado, despertó los primeros aplausos de la concurrencia.
Tampoco resignó puntos y el marcador quedó 1 a 1.
De a poco, el europeo, que contó con el apoyo mayoritario de sus compatriotas, sentados en la platea del court número 1, fue marcando el terreno con un sólido drive. El tandilense apelaba a su poderoso servicio para mantenerse en partido, hasta que la lluvia volvió a interrumpir la acción, con el tanteador 2 a 3 y ventaja para Delpo en el sexto juego, cuando transcurrían los 23 minutos. Después de 65 minutos siguieron y el tandilense, a puro saque, emparejó 3 a 3.
Desde el otro lado, Djokovic contestaba con las mismas armas. O, mejor dicho, con algunas más poderosas como un revés indescifrable para el argentino, y 4 a 3 para Nole. Los primeros servicios de ambos marcaban diferencias y así el serbio se situó 5 a 4 arriba. El primer amague de quiebre en el partido se produjo en el undécimo game, cuando Del Potro tuvo dos chances para situarse arriba. Pero Djokovic los evitó, con la complicidad de un servicio demoledor. Inmediatamente, el tandilense sacó provecho de dos devoluciones fallidas del serbio para ponerse 6 a 5 arriba.
Al siguiente juego, los dos diseñaron lo mejor del primer set. Porque el argentino manejó el revés a su antojo y el serbio apostaba a la devolución para seguir en la pelea. Del Potro se quedó con el parcial (7 a 5), luego de no poder aprovechar tres set points, a partir de un servicio implacable. Una hora de juego para el 1er. set.
El comienzo del segundo segmento deparó un game largo (9 minutos), en el que Djokovic se adelantó en la pizarra, con los argumentos que lo llevaron a la cima: solidez defensiva y variedad de golpes. Pero el serbio se encontró con un paciente y fuerte Del Potro, que sacó provecho de una devolución fallida y quebró para el 2 a 1.
Entonces, el argentino adquirió la cuota de confianza que, tal vez, le hacía falta para erigirse en el dominador del cotejo. Su saque continuó haciendo daño, pero sus otros golpes (revés, drive, volea) también ganaron consistencia. Así, Delpo tomó ventaja 5 a 3 y se perfilaba para lo mejor. Sin embargo, el serbio logró conservar su saque y achicó 4 a 5. Pero en el décimo juego, el tandilense sacó impecable, mantuvo el aplomo y logró el bronce que merecía desde el viernes último.