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La Justicia investiga la desaparición de unos 200 revólveres, pistolas y hasta subametralladoras del Registro Nacional de Armas (Renar) que ocurrió a fines del año 2012, pero recién se dio a conocer esta semana.
La causa está a cargo del Juzgado Federal número 7. Las armas formaban parte de un lote de miles de unidades que estaban listas para ser destruidas en una planta procesadora del partido bonaerense de Campana.
El hecho fue descubierto de manera fortuita: algunas armas habían sido remitidas por error, ya que todavía estaban sometidas a procesos judiciales; cuando se las fue a buscar para remitirlas a los juzgados correspondientes, se advirtió que varias bolsas, que estaban en el garaje del Renar, habían sido abiertas. Según las fuentes consultadas, la mayoría de las armas que faltaban -especialmente, pistolas 9 mm, pero también revólveres y subametralladoras- eran las de mejor estado. La custodia del depósito está a cargo de la Policía Federal.El hecho ocurrió el 18 de diciembre de 2012.