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De a poco, con más pena que gloria, las cargas se van acomodando. Por fin la mamá de una niña que habría sido abusada, podrá ser querellante en defensa de los intereses de su hija. En un fallo del jueves último, la sala uno del Tribunal de Impugnación del Poder Judicial de Salta, rechazó el planteo de la defensa del imputado por el abuso sexual a una niña de 9 años, caso que todos recordarán por un polémico informe del Cuerpo de Investigadores Fiscales (CIF) que calificaba el cuerpo de la pequeña como “objeto de deseo”. El fallo le permitirá a la progenitora actuar como querellante conjunto a través de su representante legal, Roberto Elio Gareca.
Esta situación fue resistida en primera instancia por la jueza correccional encargada del caso pero luego, a través de un planteo específico de la querella, debió rever la posición y finalmente aceptó a la madre de la niña como querellante. Inmediatamente el fallo fue apelado por el defensor del imputado, abogado Santiago Pedroza, con planteos que Gareca, abogado de la madre, calificó de “dilatorios”.
Al aceptar la Justicia que la madre intervenga en el proceso penal, su abogado podrá realizar una serie de presentaciones tendientes a cuestionar diversos aspectos procesales que se perciben como nulos o irregulares en esta causa por abuso sexual. Sin la posibilidad de querellar, la madre de la niña no podría plantear elementos en nombre de los intereses de su hija, dejándola en una situación de indefensión y convalidando que queden firmes situaciones que se consideran irregulares o nulas, como es el caso del dictamen del CIF, refrendado por Buabse, que indica que el cuerpo de la niña de 9 años puede ser “objeto de deseo” sexual.
Consultado el abogado querellante, Roberto Elio Gareca, manifestó “beneplácito” por la acertada decisión del Tribunal de Apelación “en no aceptar los planteos dilatorios del defensor del imputado de este grave hecho de abuso en contra de una pequeña de 9 años, con el objeto aparente de lograr la dilación de la causa, su prescripción y, por supuesto, la impunidad del imputado”.
Vale recordar que este caso saltó escandalosamente al dominio público en 2012 cuando se conoció un informe que redactó el CIF como parte de una investigación sobre el presunto abuso sexual a dos nenas, y decía que una de ellas “relata lo sucedido sin mostrar signos de angustia”. Más grave fue el texto que describió a una de las niñas, de 9 años, como alguien que muestra un “cuerpo desarrollado” que puede llegar a ser “objeto de deseo”.
El reporte también señala que las dos chicas, que habrían sido abusadas por el mismo hombre de acuerdo a la denuncia, tienen una “fisonomía diferente” a la de otras niñas de su edad. Para escribir este informe, personal del CIF entrevistó a las nenas sin usar la cámara gesell, sistema diseñado específicamente para este tipo de casos.
Tres denuncias diarias en Salta
“No quiero que mi honorabilidad se vea afectada con un informe que no realicé, pero que tuve que avalar”, señaló en medio del escándalo, el año pasado, Gabriela Buabse, quién era directora del CIF y ahora es fiscal penal. El informe que rubricó señala que una niña de 9 años podía ser “objeto de deseo”. Cuando los detalles del polémico documento salieron a la luz, Buabse se defendió y deslindó responsabilidades. No era la primera vez que la directora del CIF, asignaba personal para elaborar este tipo de informes, habida cuenta que sólo en la ciudad de Salta, anualmente se producen casi tres denuncias diarias por presunto abuso sexual de niñas, niños y adoles centes.