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Pese a las intervenciones de la Policía Federal y sus equipos de investigación, todavía hay misterio en torno a la muerte de un joven que, al parecer, cayó de un paredón del Pabellón I de Ciudad Universitaria, en el barrio de Núñez, y murió por el impacto.
La causa, que tiene por víctima a Mariano Nicolás Solá de 18 años, fue caratulada como “muerte dudosa”. Según trascendió, el episodio se produjo cuando regresaba de una fiesta de electrónica acompañado por su hermano menor y otros amigos.
Alrededor de las 10, la víctima se golpeó la espalda contra el piso y se desencadenó la tragedia. Se había alejado del grupo con el que se movía y con quien, en un principio, esperaba el colectivo que los llevaría hasta Avellaneda.
Según informaron fuentes policiales, el chico había ingerido “una importante cantidad de alcohol” durante la fiesta. A su vez detallaron que hay datos imprecisos que aún analizan: no determinaron desde qué altura cayó, dónde fue el evento al que concurrieron y esperan los resultados de la autopsia porque no descartan la teoría de una golpiza. “Me voy a ir al cielo, me voy a volar”, le habría dicho Mariano a sus amigos antes de esta fatalidad.