inicia sesión o regístrate.
Otra muerte violenta conmocionó ayer a toda Catamarca: en la madrugada una mujer y su bebé murieron luego de que un hombre, concubino de la víctima, prendiera fuego a su precaria vivienda en un barrio de la zona sur de la capital catamarqueña, ubicado sobre la ruta nacional 38.
El agresor fue detenido horas después tras un amplio operativo policial, según se informó a la prensa.
La víctima fue identificada por la Policía y la Justicia como María Celeste Silva, de 22 años, quien sufrió serias quemaduras, como así también su bebé de apenas un año.
En tanto, sus otros dos hijos, de 3 y 6 años, fueron rescatados por un adolescente de 16 que escuchó los gritos desgarradores y acudió al lugar.
Cuando el chico quiso ingresar de nuevo a la casa para rescatar a la mamá y su bebé, las llamas ya habían cubierto toda la casa y no pudo hacer nada.
Según versiones, en la noche del domingo el sujeto, de apellido Burgos, de 31 años, se presentó en la precaria vivienda con una actitud muy violenta, lo que llevó a la mujer a resguardarse en el interior de la casilla con sus tres niños.
Enfurecido, Burgos la amenazó para que lo dejara pasar, y como ella no cedió comenzó a arrojar papeles encendidos una y otra vez, hasta que logró que el fuego se propagara.
Cuando las llamas se descontrolaron Burgos escapó corriendo.
Antecedentes
Allegados a la mujer dijeron que el hombre "es muy violento" y que hace varios días ella venía sufriendo serias agresiones por parte de la pareja.
"Esto se tendría que haber evitado cuando ella puso la denuncia y llamó a la Policía para que viniera a sacarlo de la casa. En ese momento vino la Policía pero no se lo llevó. Ahora ya es tarde", se quejó Alejandro, un vecino que consideraba "casi como una hija" a la fallecida muchacha.
Remarcaron que la joven de 22 años habría formulado denuncias policiales por esos hechos de violencia, pero el hombre continuaba frecuentando la casa.
Los vecinos contaron que hace tres días el hombre había intentado matarla con un cuchillo y se salvó por la ayuda de varios de ellos, que intervinieron a tiempo.
"Ayer a la mañana (por el domingo) ella vino a casa después de que él la amenazara otra vez, pero no quiso quedarse para que yo ni mi familia tuviera problemas con él, y regresó a su casa", añadió Alejandro.
El candado, clave
Hasta ayer los peritos que analizaron los restos de la precaria casita de madera y chapas buscaban elementos para determinar si la joven se había encerrado con sus pequeños hijos para evitar ser agredida, o si su concubino la habían encerrado y luego prendido fuego.
Para ello trataban de dilucidar, en medio de las cenizas y restos de lo que fue la casa, cómo estaba colocado el candado que cerraba la puerta de ingreso a la vivienda.
Si estaba del lado interno de la vivienda, estimaban que ella se habría encerrado para impedir que Burgos ingresara.
En cambio, si estaba del lado de afuera, se presuponía que él la habría encerrado con sus hijos para luego quemarlos.
Acusado
Finalmente, el presunto agresor fue detenido por efectivos de fuerzas especiales y personal de la comisaría décima poco antes de las 9 en el domicilio de un familiar.
Fuentes judiciales, que trabajan bajo las órdenes del fiscal en turno, Luis Baracat, confirmaron que Burgos es el principal sospechoso del hecho, pues son varios los testigos que confirmaron su presencia en la precaria vivienda solo minutos antes del incendio que apagó la vida de la joven María Celeste y su pequeño bebé.
Hasta hoy Burgos está arrestado en averiguación del hecho y hoy cambiaría su condición a "detenido". Mañana el fiscal Baracat lo indagaría y le imputaría los delitos de doble homicidio y tentativa de homicidio por las dos niñas salvadas.