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El grupo yihadista Estado Islámico (EI) reivindicó el ataque suicida de este viernes que causó más de 50 muertes cerca de la ciudad siria de Al Bab, un feudo que perdió a manos de los rebeldes y tropas turcas. El ataque se produjo con un vehículo cargado con explosivos en las afueras de la localidad, situada en la provincia de Alepo. El atacante suicida "condujo su coche bomba hacia un grupo de soldados en Susián", a unos ocho kilómetros de Al Bab, precisó el EI mediante un comunicado en internet.
"Menos de 24 horas después de la derrota del EI, un suicida atacó dos sedes de los rebeldes en la localidad de Susián, al nordeste" de Al Bab, en el norte de Siria, afirmó Rami Abdel Rahman, director del Observatorio Sirio de los Derechos Humanos (OSDH). Insurgentes sirios respaldados por Turquía habían conquistado el jueves esa localidad.
"El balance se eleva a 50 muertos pero podría agravarse ya que hay decenas de heridos, muchos de ellos en estado crítico" según el OSDH, que cuenta con una red de fuentes en todo el país, y dio anteriormente un balance de 29 muertos.