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"Por las Sendas de mi Tata" es un emprendimiento local que te lleva a conocer los misterios y los bellos lugares de montaña que posee Chicoana. La idea, que surgió de Álvaro Plaza, ha tenido amplia repercusión en el visitante extranjero y el propio salteño. Esta alternativa de trekking y cabalgata es un viaje perfecto para desandar senderos de yungas, miradores espectaculares, conocer un castillo en medio de una exuberante vegetación, recorrer una bodega familiar y el avistaje de cóndores desde los enigmáticos cerros La Candelaria y El Antigal.
Plaza, es técnico en Turismo, recibido de la tecnicatura que se dicta en El Carril, su familia es dueña de la mítica Finca La Candelaria, al oeste de esta localidad, por el camino de Los-
Los. Allí en el ingreso del campo, yace una pequeña gruta de la Virgen de La Candelaria. Desde este punto se aprecia la maravilla de la naturaleza en todo su esplendor.
En medio de tanto verde y una paz eterna, surgen las leyendas de estos caminos, aquellas historias que Álvaro les relata a los visitantes y que los deja pasmado.
"Cerca del cerro en medio de un torrente de agua que baja como una catarata algunos siguen buscando la campana que supo ser de un capilla de un curas españoles que se asentaron por estos lados. Así cuenta la leyenda, pero jamás la han encontrado. En febrero, mes de la virgen de La Candelaria, se escucha la campana", relata Plaza.
A unos minutos de esta escondida quebrada surge el antigal, un sitio arqueológico poco conocido y que aún ostenta tener vestigios de un asentamiento indígena. "Está protegido y bien cuidado, la travesía no incluye este lugar, porque queremos preservarlo, pero alguna vez vinieron arqueólogos a visitar el antigal. Esta zona está repleta de misterios y leyendas".
El emprendimiento se llama "Por las sendas de mi Tata", consiguió fondos de Turismo de la Provincia, para adecuar el proyecto a las necesidades y comodidades del turista. El municipio de Chicoana lo apoya y promociona como una idea local. Lleva varios meses de actividades con cupos que se agotan de forma inmediata apenas se promociona la salida. Particularmente el salteño, y el extranjero son lo que optan por estas travesías en Chicoana. La aventura está asegurada. La excursión varía de acuerdo a la salida. Puede durar mediodía, o toda la jornada. También puede tener un toque gastronómico en medio del camino o al final de la travesía. A veces una guitarreada no está mal para relajar a los aventureros. Todo en un ambiente familiar y ahí cerquita del pueblo.
Cerros llenos de misterio
Como es típico del norte, nuestra geografía excepcional por sus colores y formas topográficas, está rodeada de leyendas. El cerro La Candelaria, tiene todo esto. Esta al oeste de Chicoana, mira siempre vigilante al Valle de Lerma. Desde sus alturas la vista panorámica es maravillosa. Por sus sendas pasaron colonizadores, indígenas y hasta científicos que estudiaron varios fenómenos ocurridos en forma simultánea por estas latitudes. Los inexplicables siniestros aéreos de la década del 80´, donde avionetas se quedaron sin instrumental, porque de forma repentina se apagaron sus sistemas. Y en el año 2008 con los "Crop Circle", estos agrogramas supuestamente de origen extraterrestre que aparecieron en unos trigales del ingreso del pueblo. El cerro La Candelaria estaba en el centro de estas apariciones, expertos en física, aseguran que el cerro es un campo magnético que atrae polvo de me teoritos (magnetita).