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Junto a sus mascotas, don Damián Vilte pasaba los días en la soledad de su departamento hasta que las dolencias de la vida y de sus 71 años cayeron sobre sus hombros. Alejandro Ramón es su vecino de Bancario y, en diálogo con El Tribuno, contó que la gente del barrio se vio obligada a abrir la puerta de su departamento el miércoles, tras escuchar quejidos.
Hace dos semanas, el abuelo había recibido la asistencia de una ambulancia y desde aquel momento no salió más. En la noche del miércoles, los vecinos lo encontraron sentado en su sillón, acompañado por sus perros, que tampoco salían, en total estado de abandono y deshidratación.
Preocupados por la situación y ante la negativa de Vilte a visitar a un médico, los vecinos pidieron una ambulancia y le dieron una primera asistencia. Sin embargo, no lograron disuadirlo para llevarlo a un centro médico.
Recién el jueves por la mañana, con la asistencia del área de Adultos Mayores, el hombre fue atendido por una médica y, en un primer momento, lo derivaron al hospital de salud mental Miguel Ragone.
Alejandro Ramón destacó que, si bien algunos vecinos aseguraban que don ViIte tenía familia, aparentemente había cortado la relación hacía un tiempo.
Desde el hospital Ragone, la secretaria de Salud Mental Claudia Roman Rú confirmó el jueves que el paciente se encontraba en estado de completo abandono.
Una vez que lograron ubicar a sus hijas, fueron ellas quienes lo llevaron para que lo atendieran en la Clínica Cruz Azul. Posteriormente, fue derivado al Hospital Militar.
Roman Rú expresó que el hombre fue asistido en un primer momento por un profesional de salud mental y un equipo del Samec.
La funcionaria aseguró que se hizo una valoración en el lugar y luego lo llevaron al hospital Ragone porque allí trabaja una médica que lo atendía.
El jueves en la noche, Vilte ya se encontraba estabilizado y acompañado por sus hijas, que también se acercaron hasta el departamento, que había quedado con consigna policial hasta que se ubicara a los parientes cercanos.
Alejandro Ramón destacó que para los vecinos, lo más importante era que el hombre cuente con alguien que lo atienda o que se resuelva su internación en algún hogar de ancianos del Estado.
"Nosotros que vimos cómo estaba el miércoles en la noche, no podemos pensar en que vuelva a estar solo", reflexionó el hombre, que se preocupó por saber a dónde habían internado al abuelo del barrio.
Las mascotas
Los perros fueron los fieles compañeros de don Damián Vilte durante este último tiempo, en que resolvió estar solo.
Las mascotas también fueron víctimas del abandono y la falta de cuidados, ya que uno de los animales deberá recibir tratamiento por sarna, además de afrontar problemas de nutrición.
Mientras el hombre no vuelva a su casa, las mascotas quedaron en manos de los vecinos.
Al perro que más comprometido se encuentra lo llevarán al área de Bienestar Animal del municipio, donde será sometido a un tratamiento contra la sarna.
Por el momento, según se pudo constatar en el barrio Bancario, el departamento se mantenía cerrado y con vigilancia policial.