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La fuerte ola de calor y la escasez de lluvias que experimenta el país plantea en Salta un escenario complejo para la actividad productiva del campo y, aunque aún no puede hablarse de sequía, ya hay consecuencias notables.
"Si no tomamos decisiones a tiempo, después nos juega en contra", dijo Joaquín Elizalde, vicepresidente de la Sociedad Rural Salteña, al inicio del diálogo con El Tribuno. Desde su perspectiva, debe interpretarse el contexto actual en tres partes: "Respecto de lo que es cultivo en sí, todavía no estamos en condiciones de decir que estamos en sequía porque estamos a tiempo con las fechas óptimas de siembra", explicó. También hizo especial referencia a la escasa humedad del suelo.
"En lo que sí estamos muy atrasados es en llenado de perfil. En ese sentido van a ser pocas las zonas o los productores que comiencen a sembrar cuando ha habido lluvias de tan solo 20, 30 o 40 milímetros. En algunos lugares van a tener que esperar que llueva por lo menos 100 o 120 milímetros", detalló.
Por su parte, el presidente de Prograno, Francisco Vidal, se refirió también a esta cuestión: "Para dar inicio a una siembra necesitamos una lluvia que supere los 60 milímetros, para llenar perfiles y sembrar con aptitud, sin mayores riesgos".
La siguiente cuestión, para el vicepresidente de la Sociedad Rural Salteña, es el tema ganadero. "La estamos sufriendo, estamos con la soga al cuello con este tema que refiere a ganadería. Calculamos siempre las previsiones de pasto hasta esta época o hasta los primeros días de diciembre. Se supone que por estos días deberíamos tener pasto para ganadería y no tenemos nada. Y ya hay gente que está haciendo destete precoz y comprando forraje para darle a las vacas, hay gente que ya está actuando", puntualizó y agregó luego: "Esta ola de calor nos perjudicó en lo que es la parición de terneros, porque mueren muchos animales. Perjudica también en lo que es trabajo de inseminación artificial y la transferencia de embriones. Esas son las pérdidas que generan estas olas de calor".
Vidal coincidió: "Respecto del sector ganadero sí está complicado porque al no haber lluvias el campo está sin pastos y viene bastante más complicado de lo que es el sector granario", comparó.
Consultado por el clima, el presidente de Prograno comentó que algunos especialistas sostienen que se normalizará en enero, y otros, en marzo. "Si fuese en marzo llegaría para las especialidades como sésamo, chía, poroto, y para soja y maíz ya llegaríamos con problemas de rendimiento".
De esta manera, aún cuando es incorrecto hablar de sequía, el campo espera la normalización de las lluvias, mientras continúa con el trabajo previo a la siembra. Elizalde comentó que en algunos lugares como Las Lajitas, que ya tuvieron dos lluvias de 50 milímetros, ya se comenzó a sembrar, pero que son casos puntuales. También dijo que el Valle de Lerma, en cuanto a lo que es siembra de tabaco y demás, está comprometido. "Todavía no se sabe si va a haber una disminución en la producción, pero los productores sí siguen regando y algunos de ellos comentaban que con las crecidas de los ríos se pueden haber roto las tomas. Entonces sí están esperando agua en el Valle de Lerma, así que diría que la espera a las lluvias está bastante generalizada", dijo.
En ese mismo sentido, Vidal compartió su análisis: "Resumiendo, para lo que es grano, estamos preocupados porque es muy desparejo, pero estamos a tiempo todavía. Es decir, estamos comenzándonos a preocupar, pero expectantes a que llueva y se acomode. En cuanto a ganadería, muy preocupados y con pérdidas, esperando el agua de manera urgente".
"¿Cuándo tendría que empezar a llover para no tener inconvenientes tanto para los cultivos como con la pastura y la ganadería?", le preguntó este medio a Elizalde: "Todo lo que es cultivo tiene tiempo hasta fines de diciembre, aunque la ventana de siembra se va achicando cada vez más, la posibilidad de conseguir contratistas se va achicando cada vez más y empiezan a haber problemas de organización, pero todavía hay tiempo. Probablemente baje la producción de soja y de maíz que es lo que más se siembra en diciembre", respondió.
"La falta de lluvias en la provincia está bastante generalizada. Hace al menos tres años que venimos así", añadió.