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El entrenador argentino Lionel Scaloni vive horas intensas aunque felices en su pueblo natal, Pujato, una pequeña localidad en las afueras de Rosario, donde le entregaron una plaqueta por haber ganado el Mundial Qatar 2022 en el medio de los festejos que se organizaron en la localidad para homenajear al técnico campeón del mundo. Un equipo de El Tribuno se encuentra en lugar.
El plantel campeón del mundo llegó ayer al país, y después de una caravana que se vio interrumpida a pocas horas de que se iniciara, los jugadores y el cuerpo técnico regresaron al Predio de la AFA, desde donde partieron, y se separaron para pasar el resto de sus vacaciones con sus respectivas familias.
"Las gracias se las tenemos que dar nosotros a toda la gente. Ahora nos damos cuenta de lo que se ha conseguido. Durante la competición estábamos muy enfocados pero ahora sabemos lo que se vivió", expresó Scaloni sobre los festejos y la magnitud que tuvo la consagración en los hinchas argentinos, las redes sociales y los medios de comunicación.
En San Martín y S. De Iriondo, la escuela 227 donde estudió, le agradece a través de una bandera "gracias por tantas alegrías".
A 100 metros del club Matienzo, en Sarmiento y S.de Iriondo, se observa una pintada que aclara "Si esto no es el pueblo, el pueblo donde está", mientras uno de los bombos posa en la vereda con su rostro.
Él, mientras tanto espera en la casa de sus padres en boulevard Colón, para salir a recibir tanto cariño aunque lejos de la marea vivida ayer en Buenos Aires, porque a pocos minutos de que el entrenador salude a sus vecinos, la plaza comienza a poblarse aunque en calma, propia de una comunidad del interior.