Vecinos y turistas se estremecieron hasta las lágrimas con la exitosa XI edición del "Vía crucis gaucho", que se desarrolló en la tarde de ayer en San José de Metán.
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Vecinos y turistas se estremecieron hasta las lágrimas con la exitosa XI edición del "Vía crucis gaucho", que se desarrolló en la tarde de ayer en San José de Metán.
Se trata de un evento único por sus características, organizado por la Municipalidad, que forma parte del calendario turístico de la provincia de Salta.
Las actividades se iniciaron en la histórica Villa San José. Gauchos de distintos fortines, montados a caballo, hicieron un recorrido por parroquias e instituciones, en las que se retrataron ermitas para reconstruir las distintas estaciones.
Una gran cantidad de vecinos caminando, en motos y en automóviles también siguieron a los gauchos para participar del singular evento, que ya es una tradición en la localidad del sur provincial.
La representación de la muerte y resurrección de Jesús fue en una cancha ubicada frente a la terminal de ómnibus, donde una importante cantidad de vecinos y turistas ya aguardaban el momento de la representación de la crucifixión, que estuvo a cargo de la Academia Sentimiento Gaucho, que dirige el profesor Matías Acevedo.
"Estoy muy contento porque nuevamente me dieron la oportunidad de representar a Jesús en este hermoso 'Vía crucis gaucho'. Es una experiencia muy linda, es difícil explicar todo lo que pasa por la mente durante esos momentos", dijo Benjamín Hoyos, quien personificó por segunda vez a Jesucristo.
"En el momento de la crucifixión se viven muchas emociones. Soy católico y todo esto me hace recordar cuando iba a catecismo y nos contaban esta historia. Al estar ahí arriba en la cruz me doy cuenta realmente de todo lo que sufrió Jesús mientras mucha gente miraba", destacó.
El poncho salteño
"Sin lugar a dudas nuestros gauchos con los ponchos salteños le dieron nuevamente a este vía crucis un marco imponente. Es un evento único en el país y en el mundo por estas características. Estamos muy contentos porque se desarrolló con éxito, para seguir posicionando a Metán como destino turístico religioso", dijo Cristina Muñoz, quien es responsable de la Unidad de Turismo de la Municipalidad.
Durante la Semana Santa existe una expresión cultural religiosa muy típica en los pueblos de América que consiste en la reconstrucción del vía crucis, en los cuales se reflejan los distintos momentos de la pasión de Cristo en cada una de las estaciones.
En San José de Metán existe un profundo sentimiento de fe entre sus habitantes. Es por eso que más allá de participar como meros observadores es muy interesante que la congregación de personas se una con un fin espiritual para representar, vivenciar y celebrar la pasión, muerte y resurrección de Jesucristo en los solemnes cultos de la Semana Santa, en un evento único por su adaptación, con la participación de gauchos de distintos fortines.
En Rosario de la Frontera
Ayer en la Ciudad Termal, con gran expectativa y con entrada libre y gratuita, se desarrolló el vía crucis viviente con noventa artistas en escena. "La Pasión de Cristo", por primera vez se llevó a cabo en los escenarios naturales del populoso barrio Ramón Abdala. El evento es organizado por el grupo Creativos, que ya lleva más de ocho años de trayectoria y contará con la colaboración de las diversas áreas del Municipio de Rosario de la Frontera y de la Secretaría de Cultura a través del Museo de Bellas Artes Quinquela Martín.
Fernando Portal, director del Museo de Bellas Artes Quinquela Martín de la Ciudad Termal, explicó que "se eligió el barrio Abdala porque tiene una cierta escenografía natural, o sea estamos hablando de que tiene varios desniveles de tierra que simulan un pequeño monte y que justo coincide la descripción de la montaña en donde se crucifica a Cristo y, al frente, tenemos un espacio libre en donde la gente que acuda tranquilamente va a poder ver hacia la altura, entonces va a quedar más imponente y más realista. El evento se desarrolla rotando los lugares para que todos los concurrentes, desde los diferentes ángulos de su ubicación, puedan disfrutar la obra".
Como ya es habitual, cada año, el vía crucis viviente de la Ciudad Termal se caracteriza por su imponente producción; actuación, vestuarios, maquillajes, luces y sonidos. "Tenemos más de sesenta personas que son los actores principales. Además, siempre tenemos varios vecinos que se suman ese día y son parte de la obra, ya que quieren vivirla desde adentro", dijo Portal.