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Cuando quedan cada vez menos puntos en juego para mantener la categoría, Juventud Antoniana no logra su propósito de sumar de a tres para salir del último lugar que comparte con Crucero del Norte, ahora cada uno con 28 puntos, en la tabla de posiciones de la zona 4 del torneo Federal A.
Los serios desajustes defensivos le privaron ayer al equipo santo alcanzar una victoria frente a Boca Unidos, que finalizó con un empate en dos goles en el estadio Padre Martearena, resultado que colmó la paciencia de la gente, exteriorizando el descontento desde las tribunas y apuntando al grupo de trabajo que encabeza el entrenador Adrián Gorostidi y a los jugadores.
La pobreza que hoy exhibe Juventud Antoniana se acentúa cada vez más. Si bien con el gol de cabeza que convirtió Martín Albarracín generó la esperanza de que esta vez se podía ganar, desde el campo de juego los jugadores no transmitieron esa confianza para sostener la ventaja parcial.
La conexión en el juego era escasa y peor aún el hecho de recepcionar algún pase. Así, Enzo Vargas tuvo en sus pies la posibilidad de ampliar las diferencias pero su remate se fue desviado, cuando fue habilitado por Iván Escobares, previo pase de Juan Perillo para que su compañero pueda avanzar sin dificultades hacia el arco de enfrente. Vargas podría haber realizado la pausa y levantar la cabeza hacia Perillo que llegaba mejor perfilado para definir ante la presencia de Lucas de León.
Juventud fue impotente para aumentar las cifras ante Boca Unidos, que no planteaba ese juego punzante y con intenciones de acercarse hasta el arco defendido por Hugo Acevedo.
Hubo desaciertos en algunos retrocesos, como ocurrió con Maximiliano Martínez, y el trámite pasaba a manos de la visita para los avances que no prosperaron. Llamó la atención por el nivel que atraviesa Martín Esparza, que se "durmió" en una entrega y un rival aprovechó para robarle el balón.
La peor versión antoniana en esta actuación de local se presento en la parte final. Fue en el instante de un saque lateral, Antonio Medina burló la marca de un defensor y cuando enfrentó a Acevedo resolvió al gol y el partido se puso 1 a 1. Luego Octavio Moscarelli ejecutó un remate desde fuera del área que pasó cerca del travesaño.
Despertó el santo y, otro en ataque, Agustín Fravre pisó el área contraria y sacó un centro al ras del césped que rebotó en un rival; el árbitro interpretó que hubo mano y cobró el tiro penal que convirtió Maximiliano Martínez. Y el conjunto correntino se quedó con 10 hombres por la expulsión de Raúl Albornoz.
Pasaba a ganar Juventud y se esperaba un final dramático. Agustín Favre, innecesariamente, cometió una falta. En la ejecución Acevedo no dio la suficiente seguridad y dejó que Medina anotará el 2 a 2 definitivo.