El diputado nacional por Salta, Carlos Zapata, pidió la palabra en la cuestión de privilegio ante sus pares en la Cámara baja, para denunciar al CEO de la empresa Massalin Particulares y, a partir de entonces, ser parte "de una campaña de desprestigio".
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El diputado nacional por Salta, Carlos Zapata, pidió la palabra en la cuestión de privilegio ante sus pares en la Cámara baja, para denunciar al CEO de la empresa Massalin Particulares y, a partir de entonces, ser parte "de una campaña de desprestigio".
Este martes, el diputado contó que "ante la negativa para conversar con el CEO de Massalin Particulares, Darío Pulenta, quien me invitaba a reunirme a través de WhatsApp, el 17 de enero, quien me invitaba a arreglar, quería que acordemos", en referencia al impuesto al tabaco.
Cabe destacar que el artículo 128 del reglamento de la Cámara define a las cuestiones de privilegios como un planteo que puede hacer un diputado para hablar delante de sus pares y ponerlo en primer lugar.
Zapata detalló que pese al pedido de Pulenta "la única forma que tiene este diputado de acordar es con sus pares en un texto que beneficie al Estado".
Y aclaró que a partir de entonces "soy víctima de una campaña de descalificación" y habló de una nota periodística en un medio nacional "en donde se me vinculaba a ciertos arreglos con empresa tabacalera". Luego ahondó: "Se desata en Salta, por parte de un senador suelo, Cornejo Taravia (Saravia), una campaña de desprestigio".