Pese a que efectivos de la División Drogas Peligrosas de la Policía descartaron, en un primer momento, la posibilidad de que el camión del carnicero Gonzalo Guzmán (34), asesinado por un ajuste de cuentas en Salvador Mazza el pasado 12 del corriente, estuviera cargado con droga, ayer los uniformados solicitaron que Gendarmería Nacional realice hoy un escaneo sobre el vehículo para despejar dudas.
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Pese a que efectivos de la División Drogas Peligrosas de la Policía descartaron, en un primer momento, la posibilidad de que el camión del carnicero Gonzalo Guzmán (34), asesinado por un ajuste de cuentas en Salvador Mazza el pasado 12 del corriente, estuviera cargado con droga, ayer los uniformados solicitaron que Gendarmería Nacional realice hoy un escaneo sobre el vehículo para despejar dudas.
La unidad frigorífica de Guzmán fue hallada oculta el viernes pasado, poco después de las 13.30, en un galpón de Tartagal. El rodado estaba vacío, pero en su acoplado frigorífico carrozado se hallaron herramientas para soldaduras.
Por ese motivo, el vehículo fue desguazado en la sede de la Unidad Regional 4 de la fuerza, por disposición del juez federal de Orán, Raúl Juan Reynoso, pero no hallaron droga oculta.
Sin embargo, descubrieron que en los paneles de la carrocería, a los costados y en la base, había “celdas”, es decir, compartimientos secretos similares a los que se utilizan para transportar cocaína clandestinamente. Un perro adiestrado por la División detectó “olor a muerto”, como se denomina al rastro que deja la droga cuando ha sido retirada.
De igual forma, otro can descubrió que había “olor a muerto” en la finca del paraje El Arenal, donde fueron encontrados sin vida los cuerpos de Guzmán y Oscar Daniel “Coqui”Aráoz (35).
¿Cómo llegó hasta ahí?
Llamativamente el camión fue hallado a 61 kilómetros del local que poseía Guzmán en Salvador Mazza y debido a eso los investigadores buscan establecer cómo llegó a un galpón del barrio Los Payos, de Tartagal, cuyo propietario es el diputado del frente “Salta Somos Todos” Manuel Pailer. El legislador deslindó toda responsabilidad en torno del caso, aunque reconoció que el tinglado había sido alquilado a un tercero, pero no dio mayores precisiones.
La muerte de Guzmán y Aráoz causó conmoción en el norte provincial y las sospechas de que sus homicidios se hayan tratado de un ajuste de cuentas se incrementaron con el correr de los días. Por el hecho hay un solo detenido, identificado como Carlos Bamba.