Cuando días atrás se le negó por octava vez la libertad condicional, el asesino de John Lennon, Mark Chapman, se disculpó por haber acabado con la vida del músico de The Beatles el 8 de diciembre de 1980. "Pido perdón por ser un completo idiota y buscar el mal camino a la gloria", dijo a la Junta de Libertad Condicional de Nueva York el último 22 de agosto, según una grabación que trascendió este miércoles. "Mucha mucha gente lo amaba. Era un gran hombre con mucho talento", afirmó, al relatar que todavía sigue recibiendo cartas en la cárcel por el dolor que aún sienten los admiradores del gran cantante y compositor. En ese sentido, reconoció y lamentó ser el culpable de causar ese sentimiento en los fans del ex Beatle, reveló la agencia de noticias AP. El mismo día en que declaró estas palabras le fue denegada su petición de libertad. Así, deberá esperar dos años más para solicitarla nuevamente.
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Cuando días atrás se le negó por octava vez la libertad condicional, el asesino de John Lennon, Mark Chapman, se disculpó por haber acabado con la vida del músico de The Beatles el 8 de diciembre de 1980. "Pido perdón por ser un completo idiota y buscar el mal camino a la gloria", dijo a la Junta de Libertad Condicional de Nueva York el último 22 de agosto, según una grabación que trascendió este miércoles. "Mucha mucha gente lo amaba. Era un gran hombre con mucho talento", afirmó, al relatar que todavía sigue recibiendo cartas en la cárcel por el dolor que aún sienten los admiradores del gran cantante y compositor. En ese sentido, reconoció y lamentó ser el culpable de causar ese sentimiento en los fans del ex Beatle, reveló la agencia de noticias AP. El mismo día en que declaró estas palabras le fue denegada su petición de libertad. Así, deberá esperar dos años más para solicitarla nuevamente.
Para los tres miembros del organismo encargado de revisar su caso, Lennon se había mostrado amable con su asesino antes de que éste le disparara cinco veces—poco antes le había firmado un autógrafo—, por lo que concluyeron que "sería menospreciar la gravedad del crimen y socavar el respeto por la ley". Antes de la audiencia, Yoko Ono, viuda del músico, envió una carta a la Junta para pedir que no excarcelaran a Chapman, ya que si salía en libertad, tanto ella como sus hijos correrían peligro.