Un joven de 25 años de la localidad santafesina de Rafaela quedó detenido ayer con prisión preventiva tras ser acusado de diez casos de abuso sexual que tuvieron como víctimas a seis adolescentes menores de edad, informaron fuentes de la investigación.
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Un joven de 25 años de la localidad santafesina de Rafaela quedó detenido ayer con prisión preventiva tras ser acusado de diez casos de abuso sexual que tuvieron como víctimas a seis adolescentes menores de edad, informaron fuentes de la investigación.
El modus operandi del acusado consistía en utilizar a chicos menores de edad para contactar a las víctimas a través de las redes sociales, y "aprovechándose del estado de vulnerabilidad de las adolescentes, buscaba inducirlas a que se sacaran fotos desnudas o a que ejerzan la prostitución", explicó la fiscal del caso, Ángela Capitanio.
La representante de la Fiscalía investiga diez casos de abuso sexual en perjuicio de seis adolescentes, indicaron voceros del caso. Los hechos investigados ocurrieron entre julio y noviembre de este año en la ciudad santafesina de Rafaela.
Según informó el Ministerio Público de la Acusación (MPA), por lo ocurrido con una de las menores la fiscal le atribuyó al joven, identificado por sus siglas como M. G. la autoría de los delitos de abuso sexual agravado por acceso carnal, promoción a la corrupción de menores y amenazas. Graves denuncias que recayeron sobre el sospechoso.
Por otro de los casos, el joven fue acusado de amenazas coactivas agravadas en tres oportunidades y promoción a la corrupción de menores.
En relación a las otras cuatro adolescentes, la fiscal del MPA le imputó un hecho ilícito por cada una de ellas por los mismos delitos, precisaron los informantes. Capitanio relató que "la modalidad delictiva era similar en todos los casos".
"El imputado utilizaba otros menores de edad para contactarse con las víctimas, y lo hacía a través de las redes sociales", sostuvo la fiscal, para remarcar que "aprovechándose del estado de vulnerabilidad de las adolescentes, buscaba inducirlas a que se sacaran fotos desnudas o a que ejerzan la prostitución".
Agregó que "a algunas de las víctimas las amenazaba diciéndoles que si no aceptaban su propuesta las iban a secuestrar para llevarlas al norte del país o que iban a matar a su familia". Esas eran algunas de las amenazas que el abusador utilizaba para manipular a las menores e inducirlas a realizar acciones sexuales de su interés.
La fiscal Ángela Capitanio, frente al aberrante hecho, también precisó que "a una de las víctimas, el imputado la abusó sexualmente y luego le dio dinero".
La fiscal mencionó que "el caso comenzó con la denuncia del padre de una de las víctimas, y luego las restantes víctimas se animaron a contar su experiencia y denunciar lo sucedido".
Tras aceptar la acusación, el juez de la Investigación Penal Preparatoria (IPP), Alejandro Mognaschi, le dictó prisión preventiva sin plazo al joven acusado de haber ultrajado de menores. Es investigado por el abuso sexual en 10 casos, donde seis mujeres menores de edad fueron sus víctimas.