De día y de noche, tropas de la V Brigada de Montaña del Ejército realizaron operaciones de adiestramiento en distintos escenarios del dique Cabra Corral desde el martes pasado. Hoy, hasta el mediodía, se cumple la última jornada del ejercicio que movilizó a una gran cantidad de soldados de las divisiones de Ingenieros, Artillería, Aviación y Comunicaciones de la fuerza de defensa.
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De día y de noche, tropas de la V Brigada de Montaña del Ejército realizaron operaciones de adiestramiento en distintos escenarios del dique Cabra Corral desde el martes pasado. Hoy, hasta el mediodía, se cumple la última jornada del ejercicio que movilizó a una gran cantidad de soldados de las divisiones de Ingenieros, Artillería, Aviación y Comunicaciones de la fuerza de defensa.
La actividad fue sorprendente, particularmente el miércoles en horas de la siesta para los ocasionales visitantes que estaban en la zona del camping El Préstamo y en el puente del dique. En la ocasión, se pudieron ver helicópteros, buzos, gomones, vehículos y columnas de efectivos con todos los equipamientos de ataque que simularon diversas operaciones tácticas de ocupación de posiciones y desembarcos.
Durante ese día, un equipo periodístico de El Tribuno pudo presenciar las operaciones lacustres y de tierra desde lugares privilegiados.
Las tareas de instrucción estuvieron supervisadas por el titular de la V Brigada de Montaña, Mariano Castelli, quien también formó parte de algunas de las duras pruebas que se diagramaron.
"Estamos convencidos de que con estas actividades podemos hacer la diferencia. Tenemos que aprender a pelear, pero para defendernos", destacó el comandante.
Las operaciones de entrenamiento estuvieron orientadas básicamente a desarrollar técnicas de la división de Ingenieros y el resto de las fracciones le dieron cobertura a esos movimientos.
En un escenario de conflicto bélico, el área de Ingenieros contribuye a la preservación de la libertad de maniobra de las propias fuerzas contrarrestando las dificultades que pueda presentar la naturaleza, tales como terrenos intransitables o accidentes geográficos. Por ello, la escenografía de un lugar como el Cabra Corral es ideal para capacitar a los miembros de esa compañía.
"Este adiestramiento operacional se replicó en otras unidades en otras guarniciones y forma parte del paquete de instrucción que tiene que tener el soldado. No solamente hace la actividad específica de Comunicaciones, Artillería, Ingenieros e Infantería sino que se compartieron habilidades entre los distintos grupos. Entonces cada hombre va ganando en riqueza profesional todo lo que adquiere en estas operaciones", destacó el coronel José Velardez, oficial de Operaciones.
De noche
Durante la noche del miércoles se repitieron las actividades realizadas en horario diurno, aunque con las complejidades que se dan en la oscuridad y sin helicópteros, ya que, por prevención, no se los ocupó. "Las patrullas tuvieron que cruzar el dique con visores nocturnos, ejecutando una toma de orilla", detalló Velardez.
Muchos de los soldados que participan en las prácticas se incorporaron al Ejército hace tres o cuatro meses y ya están siendo capacitados con todos los elementos disponibles de la fuerza para sus instrucciones.
Acciones concretas
Instrucciones de gran despliegue como la que se montó en el Cabra Corral también se realizaron en la frontera andina con Bolivia, donde la V Brigada de Montaña tiene entre sus misiones, además de los entrenamientos, brindar apoyo a Gendarmería para los controles de pasos ilegales y, así, disminuir el narcotráfico en esa área.
Las funciones que cumple el Ejército en el norte argentino se puede resumir en tres ejes: apoyo a la comunidad, contribuir al esfuerzo de la fuerza de seguridad en la zona y hacer adiestramiento de sus tropas.
La base del operativo está ubicada en La Quiaca, desde donde se coordina el despliegue de radares, patrullas y puestos de observación. Los primeros resultados de las operaciones, certificados por Gendarmería, fueron la disminución del tráfico ilegal en la zona.