La cita es este domingo, desde las 10, en la plaza del Deporte, ubicada en la segunda rotonda de Tres Cerritos. El encuentro es entre todos aquellos que quieran darle su apoyo a la Fundación Hope.
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La cita es este domingo, desde las 10, en la plaza del Deporte, ubicada en la segunda rotonda de Tres Cerritos. El encuentro es entre todos aquellos que quieran darle su apoyo a la Fundación Hope.
Como todos los años, la Fundación organiza este evento para sumar a las familias salteñas en apoyo a los niños que realizan su tratamiento contra el cáncer.
"Los años anteriores hacíamos la maratón por categorías y, dependiendo de esto, era el precio de la pechera, pero este año la situación está complicada para todos y resolvimos hacer una sola categoría", expresó Elena Saravia, coordinadora general de Hope.
En esta ocasión, la maratón será recreativa y el recorrido será desde la plaza del Deporte hasta el ingreso a la Universidad Católica de Salta y de regreso al punto de partida.
Saravia destacó que pueden sumarse los interesados en todas las edades y también se puede hacer el recorrido en rollers o bicicletas.
Al finalizar la maratón se realizarán los sorteos con los números de las pecheras y, gracias a la donación de algunos amigos de Hope, los premios son tablets y una bicicleta. "Esperamos tener más premios hasta el fin de semana, gracias a los que nunca dejan de colaborar", agregó Saravia.
La venta de las pecheras se realiza en la sede del albergue, en Alvear 1370, de 9 a 18. También se podrán adquirir el mismo día de la maratón, en la segunda rotonda de Tres Cerritos, al igual que las camisetas de Hope, que tienen un costo de 350 pesos.
La situación actual
En este momento, el albergue de la Fundación Hope está cubierto en su totalidad y aloja a niños que recién están iniciando su tratamiento. Todos provienen del interior, en particular de Orán, Tartagal y el departamento de Anta. "Todo lo recaudado en la maratón apunta a mantener los programas de ayuda que lleva adelante la Fundación", recordó Saravia, y advirtió que les hacen falta en este momento barbijos, pañales descartables y leche deslactosada.
"Estas son las necesidades básicas de nuestros chicos, después vienen las que tiene cualquier hogar", expresó la coordinadora general.
Agregó que son siempre bienvenidas las donaciones de jabón para lavar la ropa, papel higiénico, desinfectantes y algunos alimentos no perecederos como té y azúcar.
"La mayoría de los chicos tiene la comida del hospital, así que los padres la retiran y vienen a comer acá. Pero algunos prefieren cocinarles", agregó.
Hope recibe a las familias del interior e incluso de otras provincias que acompañan a los pequeños que realizan tratamientos contra el cáncer en el Hospital Público Materno Infantil. Desde hace varios años, la Fundación busca colaboración para ampliar el albergue y recibir a adolescentes en tratamiento.