Un cruce de versiones se generó en las últimas horas por un caso de violencia de género. La concejal Romina Arroyo denunció durante la última sesión que la jueza Mónica Naranjo le retiró la custodia policial a una víctima e incluso pidió la renuncia de la magistrada. Desde el Poder Judicial, en tanto, contestaron con un parte oficial en el que se explica que el abogado de la víctima había pedido suspender la vigilancia personalizada.
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Un cruce de versiones se generó en las últimas horas por un caso de violencia de género. La concejal Romina Arroyo denunció durante la última sesión que la jueza Mónica Naranjo le retiró la custodia policial a una víctima e incluso pidió la renuncia de la magistrada. Desde el Poder Judicial, en tanto, contestaron con un parte oficial en el que se explica que el abogado de la víctima había pedido suspender la vigilancia personalizada.
"Pido que se considere la renuncia de la jueza Mónica Naranjo porque no es idónea", manifestó Romina Arroyo en la sesión del miércoles. La concejal denunció que la víctima recibió una amenaza por parte de su agresor, que está en riesgo y cuestionó el accionar de la Justicia y la Policía en este tipo de casos.
La legisladora también planteó que, en estos casos, la consigna policial debería asignarse al agresor y no a la víctima. Consideró que lo contrario es cargar a la víctima con el mayor peso mientras el agresor puede seguir haciendo su vida normalmente.
La concejal también se refirió a la necesidad de crear aplicaciones para el celular que cumplan la función de botón antipánico.
Romina Arroyo manifestó su malestar por el tema el miércoles, en el Día Internacional por la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres. "Las mujeres estamos muriendo todos los días por un caso de femicidio y, sin embargo, la Justicia demora mucho tiempo con las causas, no hay botones antipánico, el personal policial no está preparado como corresponde para atender estos casos", sostuvo.
Desde el Poder Judicial, en tanto, se difundió que en la causa que se tramita la jueza de Violencia Familiar y de Género 2 Mónica Naranjo y el abogado de la víctima solicitaron el "cese del régimen de la custodia personalizada".
Detallaron también que el defensor argumentó que su representada tiene "una vida vigilada" y que habría perdido "toda su forma de vida social, familiar y laboral".
Al resolver en el caso, la jueza dispuso el pasado 20 de noviembre "el cese de la custodia personalizada". El Poder Judicial comunicó que se ordenó custodia policial fija hasta la entrega de un botón de pánico" u otro dispositivo apto para la efectiva protección de la víctima".
Denuncias
Un total de 20.830 denuncias por violencia de genero se registraron hasta septiembre de 2020 y aún quedan por relevar los meses de octubre, noviembre y diciembre, que son los meses donde más denuncias se realizan de acuerdo a los informes anteriores.
Los datos surgen del informe anual que presentó esta semana el Observatorio de Violencia contra las Mujeres.
"Las llamadas al 911 por motivos de violencia familiar y de género han aumentado, superando la cantidad de llamadas durante los primeros meses del año, a los dos años anteriores, con un incremento durante la etapa de aislamiento social preventivo y obligatorio, dando cuenta de que quienes no podían salir de sus casas acudieron a este sistema de emergencia", se difundió.
También llevaron a cabo un abordaje sobre los motivos del aumento de situaciones de violencia de género, en principio teniendo en cuenta la visibilización de la problemática, que alienta la denuncia. Realizando una reseña desde 1990 cuando la OMS reconoce este tipo de violencia como un problema de salud pública hasta llegar al ámbito local con la declaración de la emergencia pública en materia social por violencia de género, la cual recientemente fue prorrogada en la provincia.
Con respecto a los municipios de la provincia, el organismo presentó el relevamiento de los recursos disponibles para la atención de situaciones de violencia de género. La mitad de la provincia cuenta con áreas de género; solo 7 cuentan con áreas de diversidad, dando cuenta de todo lo que queda por hacer, reforzar recurso humano, presupuesto y jerarquizar la tarea de operadores y operadoras, para que lleven a cabo el seguimiento de casos.