No hay motivo alguno que justifique la violencia extrema que suele desatarse en trifulcas entre bandos disidentes. Sin embargo, quienes forman parte de los salvajes enfrentamientos encuentran motivos de sobra para desatar la ira en contra de quienes consideran "el enemigo". El fin de semana en Orán la Policía registro dos sangrientos enfrentamientos en la zona norte de esa ciudad. Uno en el barrio 200 Años y el otro en el barrio Caballito, barriadas que solo se dividen por una calle.
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No hay motivo alguno que justifique la violencia extrema que suele desatarse en trifulcas entre bandos disidentes. Sin embargo, quienes forman parte de los salvajes enfrentamientos encuentran motivos de sobra para desatar la ira en contra de quienes consideran "el enemigo". El fin de semana en Orán la Policía registro dos sangrientos enfrentamientos en la zona norte de esa ciudad. Uno en el barrio 200 Años y el otro en el barrio Caballito, barriadas que solo se dividen por una calle.
Frente a la gravedad de los hechos uno de los heridos tuvo que ser intervenido quirúrgicamente y se le extirpó un riñón, mientras que a otro lo tuvieron que trasladar de urgencia en vuelo sanitario hasta el hospital San Bernardo de esta capital. Tras los incidentes ocurridos el violento fin de semana en Orán solo un menor de 15 años fue aprehendido como responsable de uno de los hechos, al cabo de algunas horas fue trasladado y puesto a disposición de sus padres.
Viejas rencillas, peleas territoriales y de poder en la zona, y en definitiva odio hacia "el del otro barrio" son algunos de los irracionales argumentos que los actores del salvajismo tienen en sus mentes a la hora de actuar. "Estos tipos, con el agravante de que hay muchos menores en el medio, suelen andar drogados y en ese estado son capaces de cualquier cosa", comentó un vecino que optó por preservar su identidad.
Barrio 200 Años
La madre de J. R., de 25 años, jura que su hijo es inocente del ataque, que la madrugada del domingo último pasaba por el lugar, avenida YPF y pasaje Chaco, lindante con el barrio Caballito, y su hijo fue atacado. Según fuentes policiales, el joven recibió más de un puntazo entre la espalda y una de sus piernas, en momentos en que se había desatado una trifulca entre distintos bandos.
Un alerta llegó al 911 y efectivos de la comisaría 24 fueron enviados al lugar. Al llegar, quienes se enfrentaban salieron corriendo velozmente y solo quedó un joven que se encontraba lesionado, se trataba de J.R. En una ambulancia fue trasladado de urgencia hasta el hospital San Vicente de Paúl, donde se le practicó una cirugía, según el diagnóstico sufrió lesión con arma blanca en el décimo espacio intercostal derecho que le afectó el neumotórax derecho, le extirparon un riñón, con lesión hepática y diafragmática derecha. Intervino la Fiscalía de Graves Atentados contra las Personas.
Barrio Caballito
El sábado por la noche, ya en la madrugada de domingo, pasada las 2 un llamado al 911 daba cuenta de un enfrentamiento entre dos grupos de personas. Una mujer de 35 años sostuvo que escuchó ruidos y gritos, salió a ver y se encontró con su hijo de 18 años, G. A., tendido a metros de la puerta de su casa -tenía una herida de arma blanca- ubicada en el Pasaje 11 de Octubre y entre Sarapura y San Luis.
Presa de una crisis de nervios la mujer logró explicar que su hijo le manifestó que un tal "Yeta" fue quien lo apuñaló con un cuchillo en la parte de la ingle, y se dio a la fuga con el arma blanca. El joven de 18 años fue trasladado en ambulancia hasta el hospital y desde ahí, en horas de la tarde del domingo, tras salir del quirófano, fue trasladado en vuelo sanitario a esta capital.
Según fuentes investigativas el joven ingresó al San Vicente de Paúl con el diagnóstico "herida punzocortante en región inguinal derecha de dos centímetros de longitud, con aliento etílico". Quedó en la guardia y salió del quirófano cerca de las 16 del domingo.