El hospital San Bernardo vivió ayer una de sus mañanas más convulsionadas desde que comenzó la pandemia. La información sobre una paciente que había sido intervenida hace una semana en el nosocomio y tuvo un resultado positivo para COVID-19 puso a todo el personal a trabajar. Desde la cabeza, con la gerencia a cargo de Pablo Salomón, hasta los médicos agremiados, mantuvieron reuniones para analizar la situación, rastrear los contactos de la paciente y elevar pedidos.
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El hospital San Bernardo vivió ayer una de sus mañanas más convulsionadas desde que comenzó la pandemia. La información sobre una paciente que había sido intervenida hace una semana en el nosocomio y tuvo un resultado positivo para COVID-19 puso a todo el personal a trabajar. Desde la cabeza, con la gerencia a cargo de Pablo Salomón, hasta los médicos agremiados, mantuvieron reuniones para analizar la situación, rastrear los contactos de la paciente y elevar pedidos.
De los 1.800 empleados profesionales y no profesionales, se informó que 4 mantuvieron contacto estrecho con la paciente.
"Me tengo que reunir con gente del Ministerio", indicó Salomón temprano. Tajante, el médico aclaró que allí no se puede atender a pacientes que hayan contraído el virus.
La persona infectada es una mujer que llegó desde Buenos Aires a mediados de mayo y fue hospedada en uno de los hoteles que el Gobierno dispuso para las cuarentenas masivas de repatriados. Según indicó Salomón, antes de llegar al San Bernardo, la mujer fue al hospital Papa Francisco por un "cuadro de abdomen agudo" . Allí se le habría realizado el primer examen de COVID-19, el cual habría resultado negativo. Con el estudio negativo y el cuadro revertido, regresó al hotel. "Vuelve a hacer el cuadro agudo y allí la traen para el hospital San Bernardo", explicó el médico.
Un primer resultado negativo en el hospital Papa Francisco y el último, antes de otorgarle el alta a la paciente que resultó positivo, despertó incertidumbre. Salomón indicó que puede deberse a que se infectó luego de la cirugía o que estaba en período de incubación.
La paciente ingresó oficialmente al nosocomio el domingo 24 y el 25 fue operada de la vesícula. El martes 26 le dieron el alta y volvió al hotel a terminar su cuarentena. Cerca de darle el alta se le tomaron nuevamente muestras que dieron positivo. La paciente es asintomática.
El martes al mediodía llegó al hospital la información oficial de que la paciente había tenido un resutado positivo en el análisis de COVID-19. Desde ese momento, la gerencia se abocó a estudiar las cámaras de seguridad y las planillas de los días de atención de la paciente. De allí surgió que cuatro profesionales estuvieron en contacto estrecho con ella.
"Uno es el jefe de guardia del domingo y el otro, el cirujano que la operó. Ambos dieron negativo en los estudios. Además, un médico residente de anestesia y otro de cirugía general están internados y estamos a la espera de los resultados", indicó temprano Salomón. Después, el hermetismo reinó en el hospital. Ni el gerente ni los médicos de la comisión quisieron dar mayores precisiones.
Mientras, se esperan los resultados de los dos profesionales que están internados en el hospital, en la zona preparada para aislamiento. Según algunos empleados del hospital, una de las profesionales aisladas presenta síntomas. Al cierre de esta edición no se conocían los resultados de los análisis.
Salomón destacó las medidas de precaución que se tomaron para atenderla. "En la guardia se la recibió con protección nivel 1 y la paciente pasó a internación aislada, aunque no la necesitaba porque tenía resultado negativo. Se la operó al día siguiente y se usaron equipos de bioseguridad nivel 3, que es el máximo", aseguró el gerente del hospital. Sin embargo, al mismo tiempo indicó: "Todo el equipo de salud tuvo contacto, y estamos aterrados", por lo que indicó que se "hisopará a quien haya que hisopar".
Salomón tendrá reuniones con funcionarios del Ministerio de Salud. Si bien no especificó si realizarán algún pedido, deslizó que el personal de salud está angustiado. "Necesitamos más que nunca la protección correspondiente y por sobre todo que al hospital San Bernardo se lo cuide, si nos infectamos va a ser nefasto", aseveró, en referencia a que el nosocomio es cabecera de la provincia.
El médico, que asumió la gerencia hace unos meses, hizo especial hincapié en que recibieron a la paciente con estudios negativos. "Aquí no atendemos pacientes con COVID, tenemos gente capacitada y el equipamiento, pero no deberíamos atender", enfatizó.
Dudas
Con respecto al hecho de que primero los resultados dieron negativo y luego positivo, el gerente habló de dos posibilidades: que la paciente se haya contagiado luego de la cirugía o que cuando se realizó el PCR y le dio negativo estuviera en un período "ventana", de incubación.
El promedio de atención del hospital es de 900 personas por día, cifra que por el contexto de pandemia debe haber disminuido.
Médicos agremiados del hospital mantuvieron reuniones que continuarán hoy para "aclarar diferentes versiones".
Desde la Coordinación de Epidemiología del Ministerio de Salud se informó ayer que no se registraron nuevos casos positivos en la provincia.
Desde el inicio de la pandemia se realizaron 2.627 estudios, de los que 2.607 tuvieron resultados negativos y 20 fueron confirmados como positivos. Ayer se activaron dos protocolos y se mantienen dos casos en estudio.