En diálogo con El Tribuno, el responsable del Fondo Especial del Tabaco (FET), ingeniero José Vilariño, relató las últimas iniciativas que el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación impulsa para la producción de tabaco y las políticas de reconversión del sector.
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En diálogo con El Tribuno, el responsable del Fondo Especial del Tabaco (FET), ingeniero José Vilariño, relató las últimas iniciativas que el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación impulsa para la producción de tabaco y las políticas de reconversión del sector.
¿Cómo afectó la pandemia la producción y la exportación de tabaco?
Bueno, le podría decir que casi toda nuestra gestión se ha centrado en administrar los efectos dañinos que está provocando el coronavirus. Casi no gestionamos en la vieja normalidad. De todas maneras, durante el primer semestre del año el FET giró a las provincias un total de casi 8 mil millones de pesos, un 22% más que en el mismo período de 2019. Y en términos de producción industrial nuestro sector pudo mantenerse creciendo un 0,5%.
Pero cayeron las exportaciones...
Con respecto a las exportaciones es pertinente aclarar dos cosas: en primer lugar el contexto donde las transacciones comerciales internacionales se han visto seriamente afectadas. Es un fenómeno global. En segundo término, aclarar que si bien es cierto que las cantidades vendidas al exterior cayeron un 25%, hay que destacar que siempre el primer semestre del año es el más débil en cuanto a exportación, más en esta situación de pandemia. De todas maneras el sector continuó exportando y generando divisas para el país y estoy convencido de que 2020 será sensiblemente mejor al 2019.
Otro dato para nosotros alentador es que entre los cinco principales exportadores del país de tabaco se encuentran tres cooperativas que involucran a más de 4.500 socios productores tabacaleros, esto demuestra la importancia que tiene el asociativismo en esta producción regional.
¿Qué se hace con el dinero que administra el FET?
Como le decía antes, el Fondo giró casi 8 mil millones de pesos. Un 70% tuvo como destino el financiamiento de diversos planes productivos, como el plan de producción y generación de empleo de Salta y también programas de asistencia a productores, mejoramiento habitacional, entre otros. El 30% restante es compensación a los productores por el precio.
¿Y con respecto a la infraestructura productiva?
Bueno, muchos de esos planes que le decía tienen que ver con inversiones de ese tipo, como el mejoramiento de la estructura de secado con estufas nuevas, reacondicionamientos y reparaciones. El pasado 1 de septiembre, por ejemplo, junto al ministro (de Agricultura, Ganadería y Pesca), Luis Basterra, inauguramos en Tucumán el dique San Ignacio, una obra financiada con fondos del FET que incorpora 1.200 hectáreas a riego beneficiando a más de 300 productores de tabaco, caña de azúcar y citrus.
Una de las responsabilidades del FET es ayudar a la reconversión del sector, ¿qué trabajos se están haciendo en ese sentido?
Déjeme decirle que una de las cosas que más me gusta de esta responsabilidad que me ha dado el ministro Basterra es la de pensar a futuro. Necesitamos ponernos a trabajar en serio en alternativas productivas. Comenzamos por la leche, el cerdo, la citronela y otros cultivos. Además, muchos países están experimentando con canola, cáñamo y cannabis para uso medicinal con resultados exitosos. No podremos seguir con miradas sesgadas o prejuiciosas sobre algunos temas. Nosotros ya iniciamos un diálogo con el INTA, el Conicet y Anmat para comenzar una etapa experimental, como otras que ya están presentes en al país al respecto.
Estas producciones significan una oportunidad para desarrollar una agroindustria con alto contenido de desarrollo tecnológico y con perspectivas de empleo tanto agrícola como industrial.
¿Qué puede decirle a los productores y trabajadores en estos momentos de tanta incertidumbre?
Lo más importante es decirles que estamos con ellos. Que el Presidente de la Nación, el ministro y quien le habla asumimos el compromiso desde el momento cero de nuestra gestión de hacer todo lo mejor para los trabajadores y productores. Y muy especialmente para las economías regionales. Es un momento muy difícil y complejo para todos, pero no nos quedamos expectantes, seguimos trabajando.
Ahora estamos por firmar un convenio con la Organización de Estados Iberoamericanos para generar acciones de formación profesional y capacitación en buenas prácticas para los trabajadores tabacaleros de todo el país.
Queremos que las provincias crezcan, mejorar la calidad de los productos, que los productores y trabajadores del sector estén cada día un poco mejor y reciban lo que les corresponde en los tiempos que corresponden. Yo quiero destacar y agradecer la gestión que están realizando los trabajadores y trabajadoras del Ministerio para realizar las acciones en tiempo y forma pese a las dificultades que vivimos. Estamos en una situación muy compleja por la pandemia, pero soy optimista para los tiempos que vienen.
¿Qué desafíos tiene el FET para el 2021?
Como le decía, primero necesitamos saber cuáles van a ser los costos de la pandemia. Ese será el primer diagnóstico a nivel general. Luego nosotros tenemos una misión muy clara: hay que ampliar la producción, ganar nuevos mercados y mejorar la infraestructura. Se trata de un círculo virtuoso y debemos tener claro que pese al contexto internacional desfavorable el sector continuó trabajando y produciendo.
Pero sabemos que no es suficiente y por eso estamos a punto de firmar un convenio con la Agencia Argentina de Inversiones y Comercio Internacional con el objetivo de impulsar la promoción en el exterior y la búsqueda de nuevos mercados para seguir fortaleciendo el perfil exportador del sector tabacalero.