Un operativo caratulado como "supuesta averiguación de delitos", que se encontraba en trámite bajo la órbita de la Fiscalía Federal de Tartagal, personal de la Gendarmería Nacional del Escuadrón 61 Salvador Mazza efectuó con éxito cinco allanamientos en simultáneo.
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Un operativo caratulado como "supuesta averiguación de delitos", que se encontraba en trámite bajo la órbita de la Fiscalía Federal de Tartagal, personal de la Gendarmería Nacional del Escuadrón 61 Salvador Mazza efectuó con éxito cinco allanamientos en simultáneo.
Con el apoyo de otros escuadrones norteños, y bajo los lineamientos del juez federal subrogante de Orán, Gustavo Montoya, los gendarmes inspeccionaron el jueves cinco domicilios en Salvador Mazza, en su mayoría predios o galpones.
Las fuerzas nacionales actuaron en simultáneo para evitar cualquier reacción y no dejar margen para el error.
Secuestraron notebooks, bebidas alcohólicas como vino en caja o botellas, fernet, miles de latas de cervezas, telefonía celular, bidones de aceites, paquetes de harina, latas de energizantes, cajas de dulce de leche, manteca de cerdo, alimento balanceado, varios kilos de maíz y dinero en efectivo en distintas monedas: pesos argentinos, bolivianos y dólares.
El total de lo incautado asciende a más de 11 millones y medios de pesos. Fuentes judiciales consultadas por El Tribuno señalaron que en los próximos días se librará un oficio judicial para la clausura de los portones de los galpones o fincas allanadas. Se trata de lugares lindantes con el acceso a la quebrada internacional.
Además de la mercadería y el dinero secuestrado, los investigadores y peritos también incautaron documentación de valor para la causa.
Los allanamientos
A raíz de un primer informe, en el que se confirmó la presencia de vehículos de mediano porte y otros de grandes dimensiones -con mercadería mayormente comestible- en los domicilios apuntados, se profundizó la investigación y se obtuvieron registros fotográficos y fílmicos. De allí surgían indicios serios sobre las actividades de contrabando, entre las que no se descartó la posibilidad de tráfico de estupefacientes.
Desde la Fiscalía federal de Tartagal solicitaron al Juzgado Federal a cargo de Gustavo Montoya, el allanamiento de cinco domicilios, dos de ellos ubicados sobre calle O'Higgins, en el centro de la ciudad de Salvador Mazza; otros dos en las calles Corrientes y Maipú, en el barrio San Martín, y el quinto en una finca ubicada en el paraje El Chorro.
Como resultado de los procedimientos se secuestró mercadería por un valor estimado en más de 11 millones y medios de pesos. Además de los productos, se incautaron otros elementos importantes para el caso, como documentación y teléfonos celulares.
A partir de la producción de esta medida, la sede fiscal no descarta avanzar con el caso con el propósito de corroborar la comisión de delitos de contrabando de exportación e importación.