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Otro policía muere en Salta por coronavirus: estuvo internado más de diez días

El sargento ayudante Lucas Matías Miró Martínez falleció esta tarde luego de haber luchado contra el COVID-19 desde el 11 de septiembre en el hospital Papa Francisco. Su hija había hecho un pedido desesperado para trasladarlo a una clínica.
Miércoles, 23 de septiembre de 2020 19:11

Otra triste noticia golpea a la Policía de Salta, con la muerte de otro integrante de la Fuerza, víctima del coronavirus. Se trata Lucas Matías Miró Martínez, quien falleció ayer en el hospital Papa Francisco de la capital salteña.

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Otra triste noticia golpea a la Policía de Salta, con la muerte de otro integrante de la Fuerza, víctima del coronavirus. Se trata Lucas Matías Miró Martínez, quien falleció ayer en el hospital Papa Francisco de la capital salteña.

El sargento ayudante murió luego de haber sido internado en el hospital de referencia desde el 11 de septiembre.

La familia intentó trasladarlo a una clínica privada lo que finalmente no pudo concretarse, aparentemente, por su delicado estado de salud.

Su hija, además, había grabado un video que se viralizó en las redes y en el cual pedía que la ayudaran a conseguir una cama de terapia intensiva para su padre.

En la grabación pidió que su papá sea trasladado porque, según ella, no habría recibido la atención necesaria.

Esta tarde, la confirmación del fallecimiento del agente Lucas Miró también fue confirmado por fuentes policiales, ya que su propia hermana, la cabo Natalia Miró Martínez, había dado a conocer el deceso.

Las autoridades iniciaron los trámites correspondientes para realizar el sepelio.

Lucas es el séptimo policía fallecido por coronavirus en Salta, teniendo en cuenta que en la reunión del COE del sábado pasado se había confirmado que eran 6 los efectivos muertos con esta enfermedad.

Ese último reporte dio cuenta de que unos 1200 policías se encontraban aislados y más de 400 habían dado positivo de COVID-19 en toda la provincia.

El domingo, los familiares de los policías salteños organizaron una caravana que contó con una gran cantidad de vehículos y personas, y en la cual pedían mayores medidas de seguridad para los uniformados, asistencias para sus familiares de los que fallecieron.

 

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