No muchos salteños se animaron a andar sin barbijo en la calle a pesar de que el Comité Operativo de Emergencia (COE) levantó la medida de obligatoriedad en la provincia después de 18 meses, según se pudo observar en una recorrida de El Tribuno por el microcentro de la ciudad.
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No muchos salteños se animaron a andar sin barbijo en la calle a pesar de que el Comité Operativo de Emergencia (COE) levantó la medida de obligatoriedad en la provincia después de 18 meses, según se pudo observar en una recorrida de El Tribuno por el microcentro de la ciudad.
La mayoría de los transeúntes consultados en las Peatonales céntricas coincidieron en que “por ahora” seguirán utilizando el tapaboca tanto en espacios al aire libre como cerrados, que con la mascarilla se sienten más seguras o seguros y que es una forma de seguir cuidándose del virus.
Desde el viernes en Salta el uso del barbijo dejó de ser obligatorio en los espacios públicos, aunque lo sigue siendo en los lugares cerrados. La nueva liberación está en sintonía con lo dispuesto por el Gobierno nacional.
Si bien la noche del viernes en la Balcarce y en el Paseo Güemes se pudo ver a los primeros jóvenes circular sin barbijos, este sábado por la mañana eran pocos los que no lo llevaban.
Patricia, iba sin ninguna protección a paso apresurado y cuando este medio le preguntó al respecto se excusó diciendo que se había quedado sin barbijo, pero que estaba yendo a comprarse uno. “Sí creo que hay que seguir usando para seguir cuidándonos”, dijo la mujer que trabaja en un comercio.
Yamila y Micaela, dos jóvenes amigas, caminaban sin tapabocas por el centro. “Recién entramos a un local y nos pusimos el barbijo, pero cuando vamos solas ya no lo usamos, así que nos parece bien que ya no sea obligatorio usarlo, ahora con el calor es imposible soportar el barbijo”, manifestó Micaela.
El médico Bernardo Biella consultado sobre su postura respecto a la nueva medida de flexibilización en Salta, manifestó que “es una medida innovadora”, aunque admitió que en una primera etapa le pareció que sacar el barbijo de un día para el otro era una decisión “netamente política”.
Biella analizó que “ha habido una baja importante de la circulación comunitaria” y que la llegada del virus Delta, que en otros países está ocasionando gran cantidad de internaciones y muertes, en la Argentina hasta el momento no hay circulación comunitaria. “Es por eso que quizá sacar el barbijo de los espacios abiertos puede llegar a ser una medida acertada por el momento. Hay que ver qué pasa a partir de los 10 días que saquemos todos el barbijo”, precisó Biella.
Comentó que en las consultas ambulatorias en general de la clínica que dirige toda la gente sigue yendo con barbijo. En la zona norte que frecuenta también gran cantidad de personas usa el barbijo en la vía pública. “Hay una conciencia que hemos tomado los salteños después de tal golpe que nos ha dado al corazón este virus que tenemos temor todavía de sacarnos el barbijo sabiendo que ha llegado el virus Delta, aunque no está circulando pero ya ha llegado”, agregó el médico.
También recordó que el coronavirus es más agresivo en el frío y ahora con la primavera, por ende, quizá, baje su capacidad de agresividad y virulencia.
Bernardo Biella señaló que particularmente seguirá usando barbijo por ahora.