La dirigencia de Juventud Antoniana apuntó al duro trabajo de empezar a cerrar acuerdos para el pago de deudas que quedaron pendientes con exempleados y exjugadores, quienes como último paso efectuaron el reclamo a través de cartas documentos. “Hay un principio de acuerdo con el Pollo Paz. Existe una buena predisposición de su parte. Todo va marchando por buenos carriles. Tengo que sentarme a arreglar con su abogado. Nuestros asesores como el doctor Juan Barbarán y mi hija, son los encargados también de que podamos llegar a solucionar este problema de deudas que se generaron de gestiones anteriores”, explicó el presidente Javier Russo.
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La dirigencia de Juventud Antoniana apuntó al duro trabajo de empezar a cerrar acuerdos para el pago de deudas que quedaron pendientes con exempleados y exjugadores, quienes como último paso efectuaron el reclamo a través de cartas documentos. “Hay un principio de acuerdo con el Pollo Paz. Existe una buena predisposición de su parte. Todo va marchando por buenos carriles. Tengo que sentarme a arreglar con su abogado. Nuestros asesores como el doctor Juan Barbarán y mi hija, son los encargados también de que podamos llegar a solucionar este problema de deudas que se generaron de gestiones anteriores”, explicó el presidente Javier Russo.
El directivo santo indicó a su vez que “lo importante es que lleguemos a un acuerdo sincero. Que elaboremos un plan de pago y lo podamos cumplir. No nos podemos embarcar en algo que después no vamos a pagar, sino que se efectivice con montos accesibles y seguros”.
Javier Russo reconoció el esfuerzo de los miembros de su comisión para hacer frente a una situación complicada en materia económica. “Convocamos a la demás listas que participaron de las elecciones y no hubo eco. Estamos solos. El incremento de unos 1.252 socios, algo muy importante de nuestra gestión, pero necesitamos más respaldo”, puntualizó el dirigente antoniano.