"El bullying es un enemigo silencioso que se nutre de la soledad, la tristeza y el miedo", rezaba uno de los carteles de color naranja que ayer sostenían un grupo de mujeres en la plaza 9 de Julio, con el objetivo se sensibilizar a la población salteña en el Día Mundial contra el Bullying.
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"El bullying es un enemigo silencioso que se nutre de la soledad, la tristeza y el miedo", rezaba uno de los carteles de color naranja que ayer sostenían un grupo de mujeres en la plaza 9 de Julio, con el objetivo se sensibilizar a la población salteña en el Día Mundial contra el Bullying.
Las estadísticas que se conocen son más que preocupantes, algunas de ellas de Unicef. Argentina ocupa el segundo lugar, después de México, en cantidad de casos de cyberacoso y el 80% de los incidentes que se registran afectan a niños. Tres de cada diez niños son víctimas de bullying y siete de cada diez han presenciado peleas dentro de las escuelas. Hay 200 mil muertes al año por casos de bullying.
"Algo hay que hacer y hay que comenzar con la escuela que es el centro de referencia. Muchos autores dicen que el bullying se genera dentro de la familia, que uno no va a reproducir una conducta si es que no la tenía aprendida desde antes. Es un sistema muy complejo que hay que abordarlo desde el Estado, la familia, la escuela y la comunidad", expresó la asistente social María Luisa Jarruz.
La profesional se desempeña en el Centro Nacional de Investigaciones Nutricionales y trabaja con la temática del bullying desde 2014. Advirtió que la obesidad es la segunda causa de discriminación en el país con el 41% de escolares obesos y que en la provincia hay un 37% de obesos .
Aunque no hay estadísticas sobre cuántos casos se registran en la provincia, Jarruz afirmó que "el bullying está presente en todas las escuelas salteñas y algo hay que hacer". Aclaró que existe una ley que es para resolver casos de conflictividad entre pares en la escuela, es decir, que dos chicos puedan pelearse dentro del ámbito escolar, pero no hay un desequilibrio de fuerzas. En el bullying, según dijo, "hay un desequilibrio de fuerzas porque es un victimario que pega a una víctima, a un chico que está vulnerado y tiene un grupo que lo arenga, es decir que sostiene al líder".
Prosiguió: "La otra parte, que es la vulnerable, es la que va tomando conductas como por ejemplo no querer ir a la escuela, tiene síntomas físicos y muchas veces llegan a no querer vivir. Uno escucha esas cosas cuando va trabajando con chicos que sufren bullying. Es tanta la vulnerabilidad que tienen que manifiestan muchas veces su deseo de no seguir viviendo. Esto es muy grave y que hay que tomar herramientas de todas las instituciones que estamos involucradas en esta situación".
Compromiso
En el acto de apertura del período escolar, el ministro de Educación, Matías Cánepa, dedicó un momento a dar un mensaje contra el bullying a los alumnos. En la escuela Dody Aráoz Costas de Jovanovich Usandivara", de Campo Quijano, dio un discurso en el que se dirigió directamente a los niños y niñas que estaban presentes.
"Me gustaría pedirles un compromiso y si lo quieren hacer van a decir "sí' fuerte. Si ustedes se quieren comprometer a no burlarse de sus amiguitos, a no burlarse de nadie y, si alguna vez se burlan de alguno, pedirle perdón y tratar de no hacerlo nunca más. Que se comprometan a no dejar a nadie solo, que se ayuden unos con otros. ¿Se quieren comprometer a eso?", les preguntó entonces Cánepa a los estudiantes, que respondieron con un gran sí.