Desde Aguas del Norte, negaron que vecinos de La Unión no cuenten con agua potable. Indicaron que el pozo se encuentra operativo desde los primeros días de noviembre y que el problema ya esta solucionado.
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Desde Aguas del Norte, negaron que vecinos de La Unión no cuenten con agua potable. Indicaron que el pozo se encuentra operativo desde los primeros días de noviembre y que el problema ya esta solucionado.
A principios de este año los vecinos formaron una asociación para buscar una solución a fin de tener agua potable para los pobladores de La Unión. Si bien hubo varias promesas de obras, las mismas no se cumplieron. En diálogo con El Tribuno, Graciela Cueto, secretaria de la Asociación Vecinal de la localidad norteña del departamento de Rivadavia Banda Sur, contó que luego de muchos reclamos y manifestaciones, en enero pasado se sintieron escuchados por el Gobierno provincial ya que en el paraje El Islay, ubicado a ocho kilómetros de la localidad de La Unión, había comenzado la perforación de un pozo profundo que beneficiaría a más de 3.100 habitantes. La obra fue licitada con un presupuesto de $358,2 millones.
El pozo se terminó en agosto. "Con mucha ilusión esperábamos que el verano nos encontrara por fin con agua. Sin embargo, hasta la fecha los vecinos no solo no tenemos agua potable, sino que padecemos las altas temperaturas que rondan los 50 grados, sin el líquido elemental", señaló.
Graciela contó que inmediatamente la asociación fue en busca de repuestas: "La explicación que nos dieron es que aún no se hizo la entrega formal a la Provincia por parte de la empresa Beton, que es la que hizo la obra, por eso no está en funcionamiento".
Pero este no sería el único problema. A esto se suma que el tanque elevado que tiene décadas está roto y la cisterna no funciona para hacer el proceso de potabilización. "Es decir que si no lo reparan seguiremos consumiendo agua de red del pozo viejo con arsénico. Y nadie se quiere hacer cargo de su reparación, no sabemos a quién le corresponde solucionarlo".
Décadas de olvido
"Hace 40 años aproximadamente hicieron un pozo con un tanque elevado de 27 metros con 60 mil litros de capacidad a 8 kilómetros del pueblo de La Unión para una población de 10 familia solamente. Ya en el año 2000 la población había crecido a pasos agigantados, en la primera gestión de Leopoldo Cuenca había problemas de agua y decide hacer otra obra, donde coloca un tanque elevado de 25 mil litros y con más de 4.000 habitantes entre el pueblo de La Unión y los parajes El Ocultar, La Ternera Atada, San Manuel, San José, y nunca tuvimos agua potable, solo agua de red", remarcó Cueto.
Añadió: "El año que viene Cuenca asume su quinto período como intendente, la población asciende a 6.000 personas y un problema tan básico como el agua no se resuelve".
La vecina comentó que durante el gobierno de Mauricio Macri, La Unión se benefició con una obra que solucionaría en principio la escasez de agua. Pero según fueron informados, el agua no era apta para el consumo por la gran cantidad de salitre y arsénico que tenía.
Aun así, la obra se llevó adelante, "hicieron un pozo con un tanque elevado con una planta potabilizadora de ósmosis inversa, a pesar de que todos sabían que no era un lugar apto. Por supuesto que no funcionó; duró menos de dos años, era agua amarga", describió.
Algunos pobladores remarcan que esos desechos van a una laguna del pueblo, donde se secaron los árboles, y donde animales que llegan a tomar agua mueren. Las temperaturas superan los 45 grados, un hilo de agua que "ni para juntar en el tacho alcanza", y niveles de arsénico por encima de lo permitido, generaron el enojo de los vecinos que se manifestaron para que "alguien" le provea agua potable a la comunidad.