La policía de Tartagal en un eficaz operativo logró poner coto a una fiesta clandestina en un camping privado, donde se expendían toda clase de bebidas alcohólicas bajo la modalidad de tickets, con distintos precios, según el trago a elección del cliente. Además, la organización cobraba una entrada general para todo público. El evento clandestino, denominado "Mega Fest", se promocionaba por las distintas redes sociales y, a juzgar por la concurrencia, hasta minutos antes de la llegada de la fuerza del orden todo había sido un éxito en "negro", sin oblar impuestos y ordenanzas exigibles y obligatorias.
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La policía de Tartagal en un eficaz operativo logró poner coto a una fiesta clandestina en un camping privado, donde se expendían toda clase de bebidas alcohólicas bajo la modalidad de tickets, con distintos precios, según el trago a elección del cliente. Además, la organización cobraba una entrada general para todo público. El evento clandestino, denominado "Mega Fest", se promocionaba por las distintas redes sociales y, a juzgar por la concurrencia, hasta minutos antes de la llegada de la fuerza del orden todo había sido un éxito en "negro", sin oblar impuestos y ordenanzas exigibles y obligatorias.
En la madrugada de ayer, en un camping de la ciudad de Tartagal se detectó un evento que no cumplía con los permisos correspondientes para la realización de un festival de esa envergadura. Se infraccionó al encargado y promotor de la "Mega Fest" .
Alrededor de las 3 de la madrugada se recibió un llamado al Sistema de Emergencia 9-1-1 que alertaba música en alto volumen y gran cantidad de personas que se encontraban en un camping situado en barrio Santa María de esa localidad, el cual pertenece a los mercantiles.
Ante este alerta y denuncia, se desplazaron agentes policiales de la comisaría 45 de la Dirección Unidad Regional 4, quienes constataron la presencia de más de 50 personas presentes, entre ellos menores de edad, como así observaron talonarios con tickets discriminados por bebidas y precios que se vendían en el interior del local.
Del mismo modo, en otro sector observaron la comercialización de bebidas alcohólicas sin tener la correspondiente autorización policial.
Tras irrumpir y detener la música y al solicitar a los encargados los permisos correspondientes para realizar el evento, el sujeto no contaba con los mismos.
Por disposición de la Fiscalía Penal 1 se notificó al responsable de 44 años por infracción al artículo 126 de la ley 7135 y se realizó el secuestro de los talonarios para ser puestos a disposición del magistrado interviniente.