Decenas de mujeres coparon ayer las calles de la ciudad de Salta al grito de "Ni una menos", a ocho años desde que comenzó esta iniciativa en todo el país. Las participantes clamaron por tener más seguridad en la provincia, para que no sigan ocurriendo casos de violencia de género.
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Decenas de mujeres coparon ayer las calles de la ciudad de Salta al grito de "Ni una menos", a ocho años desde que comenzó esta iniciativa en todo el país. Las participantes clamaron por tener más seguridad en la provincia, para que no sigan ocurriendo casos de violencia de género.
Bajo el lema "Vivas, libres y desendeudadas nos queremos. Con este Poder Judicial no hay Ni una menos", se realizó ayer la marcha que arrancó en la plaza 9 de Julio.
Salta está en emergencia por violencia de género desde 2014, sin embargo son muchos los casos de ataques a mujeres que ocurren a diario. De acuerdo con un informe que dio a conocer la Corte Suprema de Justicia de la Nación, el año pasado ocurrieron 10 femicidios en la provincia. Cifras lamentables que por ahora las políticas públicas no las pudieron evitar.
Cuando la marcha llegó hasta la Legislatura provincial se produjo un momento de tensión porque las manifestantes derribaron las vallas que estaban colocadas desde días anteriores.
Participantes
Amigos, familiares y allegados a diferentes víctimas de femicidio pidieron justicia. Una de ellas fue la amiga de Nahir Klimasauskas, quien fue asesinada en Orán.
"Nahir era una chica de 27 años que el novio la tiró del 4º piso. Las organizaciones salieron a marchar y hoy seguimos pidiendo justicia", sostuvieron las participantes a la marcha, al tiempo que indicaron: "La violencia está en todos lados. Pasó hace poco con una chica de bajos recursos que fue abusada y tirada en el vertedero San Javier".
"Queremos una Salta más segura", comentó otra persona que participó del 3J. "Se sale a marchar por muchísimas cosas. Hace 8 años marchamos por los femicidios, no queremos que nos sigan matando, mientras el Estado no hace nada por nosotras", dijo.
Por su parte, familiares de Paola Tacacho, la docente salteña víctima de femicidio en Tucumán, recordaron que la joven "hizo 22 denuncias contra un alumno acosador. Ya pasaron dos años de su asesinato".
"Cuando pasa algo en tu núcleo es tremendo. Quiero que la sociedad se concientice de que le puede pasar a cualquiera. Ninguna mujer es libre. Mi prima salía del gimnasio cuando fue atacada a puñaladas. Es difícil porque más allá del dolor, nos toca", agregó.
La Asamblea Transfeminista Salta se concentró el viernes por la mañana en las afueras de la Ciudad Judicial, donde se presentó un "Tendedero de deudores alimentarios, abusadores y femicidas". Además allí se recibieron adhesiones en contra de la ley de registro de obstructores de lazos familiares en la provincia, norma muy resistida por el colectivo feminista.
En la Catedral
La manifestación se vio empañada anoche por el ataque a dos policías en inmediaciones de la Catedral Basílica. Antes del incidente monseñor Mario Antonio Cargnello había pedido que saquen las vallas de la Catedral, ya que se iba a realizar una misa.
La multitudinaria marcha, que recorrió diferentes calles de la capital salteña y que pasó por la Legislatura y la Catedral Basílica, tuvo momentos violentos cuando un grupo menor de manifestantes intentó tirar las vallas de los mencionados edificios.
Fuentes oficiales confirmaron a El Tribuno que tras los incidentes provocados por un grupo de mujeres, dos efectivos sufrieron lesiones. Se trata de una oficial y de una agente que fueron retiradas por avenida Belgrano y atendidas por el personal de salud.
"Vivas y libres"
Miles de mujeres se expresaron ayer en distintos puntos del país, a ocho años de la primera marcha denominada "Ni una menos", para denunciar los hechos de violencia.
Bajo el lema "Vivas, libres y desendeudadas nos queremos. Con este Poder Judicial no hay Ni una Menos", hubo distintas movilizaciones, con epicentro en el Congreso de la Nación, donde se leyó un documento consensuado.
"A 40 años de recuperar la democracia, decimos: ¡No hay democracia con un Poder Judicial al servicio del poder económico y conspirando contra la organización social y política, criminalizando a sus referentes; no hay democracia con deuda externa ni bajo el control del FMI; no hay democracia con estos niveles de pobreza; no hay democracia si se persigue y estigmatiza la protesta social!", indica el texto.
En ese sentido, señala que "los transfeminismos populares dejamos en claro que esta Justicia no es nuestra".