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"Decidí rendir homenaje a Pitín Zalazar, uno de los cantores más relevantes de la música popular actual. Como dice una de las estrofas: "Pitín Zalazar, viajero, trasciende el tiempo con tu guitarra; revive esas melodías que se han quedado olvidadas". En un mundo en constante transformación, es vital mantenernos conectados con el origen de nuestra música. Este cantor es un puente entre el canto nuevo y aquel que emocionó a nuestros padres y abuelos. Una guitarreada con este artista es como sumergirse en un océano de canciones que, aunque inicialmente puedan parecer desconocidas, despiertan emociones profundas que forman parte de nuestro ADN folclórico", aseguró en el inicio de la charla Pablo Quijano.
"El lanzamiento lo hicimos en conjunto con mi amigos del dúo más salteño: Tucanychaya, Con Chayita Barrionuevo y Tucán Peretti, y el homenajeado Pitín. El single viene acompañado de un videoclip que se puede ver en mi página de youtube @pabloquijano", agregó el cantor del "Portal de los Andes".
El mencionado artista inició sus primeras travesuras artísticas en su pueblo natal de Campo Quijano, y sumó a su repertorio canciones de su propia autoría, que le brindaron un plus a su carrera.
Su recuerdo de niño en Jesús María
"Debuté a los 12 años en el Festival de Jesús María, siendo uno de los primeros niños en pisar los grandes festivales de Córdoba. En aquel entonces, mi abuelo, Alejandro Ávila Medina, era mi manager, y juntos nos aventuramos en una gira inolvidable por la provincia. Fue una experiencia única: abuelo y nieto llevando el folclore como bandera. En ese tiempo, no era común ver niños cantando en este género, ni jóvenes interpretando zambas, lo que convirtió mi presencia en una novedad para el público", añadió Pablo.
"Durante mi adolescencia, formé el grupo Los Soñadores junto a amigos músicos de Campo Quijano. Con ellos recorrimos los festivales de Salta con un formato inspirado en Los Nocheros, a quienes siempre he admirado. Con este grupo, obtuvimos el premio Martín Güemes de Bronce en 1997. Nos iba muy bien, pero la vida nos llevó por caminos distintos, y el mío siempre estuvo marcado por la vocación solista", enfatizó.
"Más tarde, me trasladé a Buenos Aires para terminar mis estudios de Filosofía. Allí comencé a trabajar en la creación de música para cine y publicidad, lo que me abrió las puertas a un mundo desconocido: la producción y los arreglos musicales. Al regresar a Salta, me dediqué a producir discos para artistas emergentes y consagrados, lo que me permitió reencontrarme con nuestra música", dijo Quijano.
"Durante la pandemia, sentí una profunda necesidad de volver a cantar. Esa situación extrema me hizo reconectar con el momento más bello de mi vida: mi infancia y la música de nuestra tierra", resaltó el músico, cantor y compositor.
"Las tendencias actuales no siempre favorecen al folclore"
"Me di cuenta de que las redes sociales y las tendencias actuales no siempre favorecen al folclore, pero aun así decidí apostar por su promoción. En 2023, me presenté en el Pre-Cosquín en Salta y gané, lo que me llevó a cantar en el escenario de la Plaza Próspero Molina con mi tema inédito "Por la Tierra", un huayno que celebra la diversidad imponente de Argentina", aclaró.
"En 2024, junto a Cabales, presentamos "La Chaca de Jesús María", lo que me permitió volver al escenario del festival mayor de doma y folclore, tras más de 30 años. Ese mismo año lancé mi disco "Viva la Vida", una colección de canciones propias con raíces folclóricas pero con melodías y letras frescas. Este disco es una invitación a llevar nuestra música un paso más allá, sin perder su esencia. Mi apuesta principal es seguir sumando canciones al repertorio folclórico argentino, convencido de que ese es el camino para mantener viva la llama", destacó Pablo.
"A finales de 2024, también presenté el disco "Criosho Music", un proyecto en el que compuse y produje todas las canciones. El álbum, con diez temas de aire folclórico argentino, fue interpretado por artistas emergentes de Estados Unidos. Este trabajo nació gracias a Matías Giménez, un salteño con una empresa de comida argentina en EE.UU., quien me encargó un disco que fusionara nuestras raíces con un enfoque global. Fue un desafío, pero el resultado me llena de orgullo", sentenció finalmente Pablo Quijano.