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Al menos seis personas fallecieron en el accidente de un submarino turístico en las costas egipcias del Mar Rojo, cerca de la ciudad de Hurgada, cuatro de ellas ciudadanos rusos, informó ayer la Embajada de Rusia en El Cairo.
La legación diplomática informó que "a un kilómetro de la orilla tuvo lugar el accidente de un batiscafo que pertenecía al hotel Sindbad". Se trataba de una excursión turística habitual para explorar los arrecifes de coral, en la que "además de los miembros del personal a bordo viajaban 45 turistas rusos, incluidos menores de edad".
La mayoría de los pasajeros, cuya salud no corre peligro, fueron evacuados y trasladados a sus hoteles y al hospital. Sin embargo, "se desconoce el paradero de unas ocho personas", declaró Víktor Voropáev, cónsul general ruso en El Cairo.
Aunque la Embajada informó de cuatro fallecidos, los medios locales aumentan la cifra a seis. Las mismas fuentes indican que hay al menos nueve heridos de entre las 29 personas rescatadas, cuatro de ellos en estado crítico.
El accidente fue provocado por un fallo técnico en los motores de la embarcación, lo que provocó su hundimiento.
La aseguradora VSK, que cubría a los turistas, se encargará de los costos sanitarios y de la repatriación de los viajeros. "Todos los turistas estaban asegurados con VSK. La aseguradora cubrirá sus tratamientos, así como su repatriación", comunicó la empresa, que añade que "todavía se desconoce el número exacto de heridos y fallecidos, ya que todavía actúan los servicios de emergencia".
