Desde el Juzgado de Instrucción Penal Nº 6 se confirmó que, hasta el momento, sólo dos personas fueron detenidas e imputadas por el “cuádruple homicidio” ocurrido el pasado 27 de julio, en “El Triángulo” de la ciudad de Libertador General San Martín.
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Desde el Juzgado de Instrucción Penal Nº 6 se confirmó que, hasta el momento, sólo dos personas fueron detenidas e imputadas por el “cuádruple homicidio” ocurrido el pasado 27 de julio, en “El Triángulo” de la ciudad de Libertador General San Martín.
En este sentido los únicos detenidos, quienes se encuentran alojados en el Servicio Penitenciario del barrio Gorriti, fueron identificados como Martín Tapia y Aldo Claros, quienes durante el pasado fin de semana fueron detenidos en distintos procedimientos realizados por la Policía provincial en Libertador General San Martín.
Al mismo tiempo, desde el juzgado a cargo de Jorge Samman, se imputó al remisero Martín Tapia, por el supuesto delito de “homicidio calificado”. En tanto Aldo Claros fue imputado por el aparente delito de “participación criminal en homicidio culposo”.
Por otro lado fuentes oficiales indicaron que en torno a la detención de Tapia se secuestró un arma de fuego calibre 22, así también municiones del mismo calibre.
Cabe señalar que en los próximos días desde el mencionado juzgado se les hará conocer a los detenidos la “causa de acusación” que pesa sobre sus espaldas y posterior a esto serán indagados alrededor de los cuatro crímenes.
Se recuerda que la detención del trabajador del volante Mario Tapia se concretó en la tarde del pasado viernes en medio de un control vehicular montado por la Policía sobre la ruta 34, a la altura del río de Zora, en Libertador
Paralelo a la detención de Tapia, según fuentes oficiales, se realizaron simultáneamente cuatro allanamientos en la vivienda del inculpado, como en la de sus familiares directos, desde donde se secuestraron varios proyectiles, calibre 22 con “punta hueca”.
El hecho fue oportunamente caratulado por el Juzgado de Instrucción Penal Nº 6, a cargo de Jorge Samman, como “atentado y resistencia a la autoridad calificado, seguido de cuádruple homicidio calificado, lesiones , robo calificado, incendio y daños contra personas a establecer, Libertador General San Martín”.
Por otro lado y a pesar del estricto secreto de sumario que experimenta el caso, desde el seno de las investigaciones se deslizó que la detención de Tapia se logró luego de que varios testigos encubiertos indentificaran al remisero como el autor de los disparos que terminaron la vida del joven policía.
Aparentemente el remisero, quien posee antecedentes policiales por delitos menores, estaría sindicado como una persona que tendría cierto “desprecio” por los miembros de la fuerza de seguridad provincial.
Si bien este dato no justificaría su detención, el testimonio de varios “testigos de identidad reservada”, sumado a filmaciones que se registraron al momento de los hechos, habrían sido vitales para reconocer a Tapia como uno de los supuestos asesinos.
Por esta razón es que luego de identificar al sospechoso, miembros de la División Homicidios de la Dirección de Investigaciones, comenzaron a seguirlo para observar sus movimientos, como así también su comportamiento.
De ahí que al profundizar la investigación lograron establecer que Tapia conducía un remis y generalmente realizaba viajes hacia el noreste salteño o hasta la frontera con el vecino país de Bolivia.
A raíz de esto es que en la tarde de ayer, el propio jefe de la Policía provincial, Jorge Luis Laureano, junto a una comisión de investigadores, fueron hasta la ciudad de Libertador General San Martín para montar el operativo que derivó en la detención del remisero.
En ese sentido los policías, quienes actuaron con discreción para evitar la fuga del sospechoso, montaron un fictioso control vehícular sobre la ruta 34, a la altura del río de Zora, que tenía como único fin la detención de Tapia.
Por ello es que cuando promediaban las 19.30 del pasado viernes, desde el control detuvieron el paso de un Chevrolet Corsa (DZM-034), que provenía de la frontera argentino-boliviana y era conducido por el sospechoso, quien transportaba a pasajeros que habían ido en un viaje de compras al vecino país.
Debido al montaje, el sospechoso no se percato que le habían “hecho una cama” por esta razón no pudo oponer resistencia cuando los efectivos lo invitaron a descender y rápidamente lo redujeron.
Paralelo a esto debemos decir que alrededor del expediente de este caso (Nº 16.409/2011), que hasta el momento consta de siete cuerpos y seguramente tendrá muchos más en un futuro próximo, intervienen el fiscal Emilio Carlos Cattan y los querellantes, Alberto Matuk, (fiscal de Estado de la provincia) los letrados Mariana Vargas, Adriana Lescaffette, María Echenique y Alberto Nallar.