Buenos Aires (NA) -- La crecida del río Luján por las fuertes lluvias registradas en las últimas horas en la región dio lugar hoy a que el municipio homónimo declarara "la alerta roja", ya que se espera que las aguas lleguen a cinco metros de altura.
Mientras a las 13 de este miércoles las aguas ya tenían una altura de 4,10 metros y desde temprano crecía a un ritmo de 0,20, se temía un nuevo desastre como el que asoló a la ciudad que es una de los símbolos del turismo religioso el 1 de noviembre de 2012, cuando la crecida fue de 5,10.
Mientras a las 13 de este miércoles las aguas ya tenían una altura de 4,10 metros y desde temprano crecía a un ritmo de 0,20, se temía un nuevo desastre como el que asoló a la ciudad que es una de los símbolos del turismo religioso el 1 de noviembre de 2012, cuando la crecida fue de 5,10.
La cantidad de agua acumulada también afectó otros puntos de la ciudad como la Terminal de Ómnibus y el puente Brown, mientras que se derrumbó un techo de la guardia del Hospital Municipal.
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Buenos Aires (NA) -- La crecida del río Luján por las fuertes lluvias registradas en las últimas horas en la región dio lugar hoy a que el municipio homónimo declarara "la alerta roja", ya que se espera que las aguas lleguen a cinco metros de altura.
Mientras a las 13 de este miércoles las aguas ya tenían una altura de 4,10 metros y desde temprano crecía a un ritmo de 0,20, se temía un nuevo desastre como el que asoló a la ciudad que es una de los símbolos del turismo religioso el 1 de noviembre de 2012, cuando la crecida fue de 5,10.
Mientras a las 13 de este miércoles las aguas ya tenían una altura de 4,10 metros y desde temprano crecía a un ritmo de 0,20, se temía un nuevo desastre como el que asoló a la ciudad que es una de los símbolos del turismo religioso el 1 de noviembre de 2012, cuando la crecida fue de 5,10.
La cantidad de agua acumulada también afectó otros puntos de la ciudad como la Terminal de Ómnibus y el puente Brown, mientras que se derrumbó un techo de la guardia del Hospital Municipal.
Oscar Luciani, intendente de Luján, sostuvo que se espera "un crecimiento rápído del río", alimentado por el agua caída en los campos vecinos. No obstante advirtió que "es difícil" que el agua afecte a la Basílica Nuestra Señora de Luján, por su alto emplazamiento, aunque si los edificios que la rodean.
Por lo pronto se había interrumpido el servicio eléctrico en varios puntos de la zona