Luis Castillo sufrió traumatismos en la cabeza, en la piernas y en la espalda. Además la fractura de un dedo y la muñeca.
SAN PEDRO (Corresponsal). Integrantes de una familia emprendedora fueron salvajemente agredidos por un grupo de personas, a cuyo frente está una mujer que se habría identificado como miembro de una comunidad aborigen y procedió a colocar carteles y banderas en el ingreso a la propiedad, ubicada en proximidades del Acheral, en el distrito Lavayén.
Al menos dos personas, entre ellos uno de los propietarios y un joven trabajador, debieron ser hospitalizados, luego de haber sufrido traumatismos, cortes en la cabeza, extremidades, espalda y otras partes del cuerpo, a raíz de los golpes que le fueron propinados.
Los miembros de la familia hicieron público el pedido a la Justicia, para que tome cartas en el asunto, ya que fueron amenazados de muerte por conocidos malvivientes, que tienen incluso, orden de captura. Comentaron que cumplieron con todos los pasos legales que ordenó la Justicia hace más de 20 años. “Tenemos juicios ganados, hay certificados de constataciones, hemos presentado como 500 hojas de todas las causas que pasaron, lo que queremos es seguridad para nosotros y para la gente a las que le damos trabajo”, dijo la familia.
En diálogo con El Tribuno de Jujuy, Luis Castillo, indicó que en la mañana de lunes, llegaron hasta tierras de su propiedad para reconstruir una casilla tras el robo perpetrado durante la semana, donde los malhechores desarmaron la casa, se llevaron los adobes, las chapas, las correas de hierro y las herramientas. “Vinimos ante la necesidad de trabajar y de fumigar la plantación de caña y fuimos invadidos por un grupo de personas, una de ellas es vecina, que quiere apoderarse de todo el cañaveral que tenemos plantado, fuimos agredidos, me atacaron por la espalda comenzaron a golpearme con palos en la cabeza, en los brazos, uno de los chicos que venía a trabajar corrió a socorrerme y también fue atacado sufriendo cinco cortes en la frente y en la cabeza y fue trasladado hasta el hospital”, apuntó.
Castillo explicó que esta clase de ataque lo vienen sufriendo desde hace tiempo y es sorprendente la impunidad con la que se están manejando. “En agosto incendiaron la plantación de caña, hay fotografías y videos que fueron entregados al Juzgado, hay órdenes de captura, y ahora esta gente vino colocó carteles supuestamente de alguna organización, en la que escribieron un nombre en otro idioma y pusieron propiedad privada. Hoy estoy pidiendo seguridad para poder trabajar, con estas lluvias si nos impiden trabajar, colocar herbicidas vamos a perder completamente la plantación de caña”, agregó.
De larga data
La familia emprendedora apuntó que en 1991, hace ya 23 años, hicieron posesión de las tierras, tras adquirirlas legalmente al anterior propietario, realizando el desmonte necesario, manteniendo el bosque autóctono. Agregó que después de más de 12 años, apareció una mujer, y se asentó en la propiedad colindante, iniciando una disputa por las tierras.
“Tenemos el interdicto posesorio del año 2007, todos los papeles presentados en el Instituto Jujeño de Colonización, tenemos cuarenta denuncias formuladas, en distintos juzgados y hasta ahora no nos pudieron dar una resolución definitiva, siempre pasa de un Juzgado a otro”, subrayó Castillo.
Sostuvo que las denuncias por jurisdicción fueron radicadas en la Seccional 53 de Rodeíto, la denuncia por invasión está a cargo del fiscal José Blanco, otras en el fiscal Resua y las restantes en las demás fiscalías de turno. “Lamentablemente las denuncias caen en las fiscalías de turno y estamos pidiendo que se unifiquen las causas y tener una solución, poder trabajar tranquilos. Algún juez va a tener que tomar la causa, para que no llegue a mayores, hay una medida de no innovar, estas personas están ejerciendo un derecho que es un juicio de posesión pero lo perdieron y están apelando y el juez le prohibió hacer actos turbatorios hacia la posesión de nosotros, pero tampoco acatan esa orden”.
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Luis Castillo sufrió traumatismos en la cabeza, en la piernas y en la espalda. Además la fractura de un dedo y la muñeca.
SAN PEDRO (Corresponsal). Integrantes de una familia emprendedora fueron salvajemente agredidos por un grupo de personas, a cuyo frente está una mujer que se habría identificado como miembro de una comunidad aborigen y procedió a colocar carteles y banderas en el ingreso a la propiedad, ubicada en proximidades del Acheral, en el distrito Lavayén.
Al menos dos personas, entre ellos uno de los propietarios y un joven trabajador, debieron ser hospitalizados, luego de haber sufrido traumatismos, cortes en la cabeza, extremidades, espalda y otras partes del cuerpo, a raíz de los golpes que le fueron propinados.
Los miembros de la familia hicieron público el pedido a la Justicia, para que tome cartas en el asunto, ya que fueron amenazados de muerte por conocidos malvivientes, que tienen incluso, orden de captura. Comentaron que cumplieron con todos los pasos legales que ordenó la Justicia hace más de 20 años. “Tenemos juicios ganados, hay certificados de constataciones, hemos presentado como 500 hojas de todas las causas que pasaron, lo que queremos es seguridad para nosotros y para la gente a las que le damos trabajo”, dijo la familia.
En diálogo con El Tribuno de Jujuy, Luis Castillo, indicó que en la mañana de lunes, llegaron hasta tierras de su propiedad para reconstruir una casilla tras el robo perpetrado durante la semana, donde los malhechores desarmaron la casa, se llevaron los adobes, las chapas, las correas de hierro y las herramientas. “Vinimos ante la necesidad de trabajar y de fumigar la plantación de caña y fuimos invadidos por un grupo de personas, una de ellas es vecina, que quiere apoderarse de todo el cañaveral que tenemos plantado, fuimos agredidos, me atacaron por la espalda comenzaron a golpearme con palos en la cabeza, en los brazos, uno de los chicos que venía a trabajar corrió a socorrerme y también fue atacado sufriendo cinco cortes en la frente y en la cabeza y fue trasladado hasta el hospital”, apuntó.
Castillo explicó que esta clase de ataque lo vienen sufriendo desde hace tiempo y es sorprendente la impunidad con la que se están manejando. “En agosto incendiaron la plantación de caña, hay fotografías y videos que fueron entregados al Juzgado, hay órdenes de captura, y ahora esta gente vino colocó carteles supuestamente de alguna organización, en la que escribieron un nombre en otro idioma y pusieron propiedad privada. Hoy estoy pidiendo seguridad para poder trabajar, con estas lluvias si nos impiden trabajar, colocar herbicidas vamos a perder completamente la plantación de caña”, agregó.
De larga data
La familia emprendedora apuntó que en 1991, hace ya 23 años, hicieron posesión de las tierras, tras adquirirlas legalmente al anterior propietario, realizando el desmonte necesario, manteniendo el bosque autóctono. Agregó que después de más de 12 años, apareció una mujer, y se asentó en la propiedad colindante, iniciando una disputa por las tierras.
“Tenemos el interdicto posesorio del año 2007, todos los papeles presentados en el Instituto Jujeño de Colonización, tenemos cuarenta denuncias formuladas, en distintos juzgados y hasta ahora no nos pudieron dar una resolución definitiva, siempre pasa de un Juzgado a otro”, subrayó Castillo.
Sostuvo que las denuncias por jurisdicción fueron radicadas en la Seccional 53 de Rodeíto, la denuncia por invasión está a cargo del fiscal José Blanco, otras en el fiscal Resua y las restantes en las demás fiscalías de turno. “Lamentablemente las denuncias caen en las fiscalías de turno y estamos pidiendo que se unifiquen las causas y tener una solución, poder trabajar tranquilos. Algún juez va a tener que tomar la causa, para que no llegue a mayores, hay una medida de no innovar, estas personas están ejerciendo un derecho que es un juicio de posesión pero lo perdieron y están apelando y el juez le prohibió hacer actos turbatorios hacia la posesión de nosotros, pero tampoco acatan esa orden”.