Tras ver frustrado su plan de evadirse de su celda haciendo un hueco a la pared, cinco de los ocho de los presos que se encontraban alojados en la comisaría 55 de Los Perales fueron reubicados en otras unidades.
La medida se realizó por una disposición de la fiscalía de turno, teniendo en cuenta que varios de los reos poseen frondosos prontuarios, en tanto que personal del Departamento de Logística de la policía concurrió al lugar y realizó una reparación cerrando el boquete realizado en la celda.
Gran sorpresa fue la que se habían llevado el martes a la tarde personal policial de la Unidad Regional 1 que efectuaba un recorrido de rutina por las comisarías. Al revisar las instalaciones de la Seccional 55 Los Perales se percató de un intento de fuga.
"Fue oportuna la intervención ya que se desbarató un intento de evasión", indicó una autoridad policial a este diario.
Ante esta situación el fiscal de turno dispuso que cinco de los ocho presos fueran trasladados a otras dependencias policiales; son aquellos que poseen frondoso prontuario, mientras que el resto continúa alojado en la comisaría aunque en una celda más pequeña.
Por seguridad, los reclusos fueron retirados por el cuerpo de infantería y llevados a otras dependencias policiales.
Cabe apuntar que estos presos (la mayoría con proceso), están a cargo del área de Judiciales.
El martes a la noche, pasadas las 18.30, efectivos policiales lograron evitar una fuga masiva de ocho presos de la seccional 55 del barrio Los Perales.
Estaban realizando un boquete en una de las paredes de la celda que da a las márgenes de un riachuelo y estaban a centímetros de lograr su objetivo.
Aparentemente, un efectivo se percató de tierra removida en uno de los calabozos así que decidió profundizar la inspección y se dio con el boquete aún no terminado.
Se investiga si esto fue realizado o no con algún elemento contundente proporcionado por alguno de los familiares de los presos durante los horarios de visita.
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Tras ver frustrado su plan de evadirse de su celda haciendo un hueco a la pared, cinco de los ocho de los presos que se encontraban alojados en la comisaría 55 de Los Perales fueron reubicados en otras unidades.
La medida se realizó por una disposición de la fiscalía de turno, teniendo en cuenta que varios de los reos poseen frondosos prontuarios, en tanto que personal del Departamento de Logística de la policía concurrió al lugar y realizó una reparación cerrando el boquete realizado en la celda.
Gran sorpresa fue la que se habían llevado el martes a la tarde personal policial de la Unidad Regional 1 que efectuaba un recorrido de rutina por las comisarías. Al revisar las instalaciones de la Seccional 55 Los Perales se percató de un intento de fuga.
"Fue oportuna la intervención ya que se desbarató un intento de evasión", indicó una autoridad policial a este diario.
Ante esta situación el fiscal de turno dispuso que cinco de los ocho presos fueran trasladados a otras dependencias policiales; son aquellos que poseen frondoso prontuario, mientras que el resto continúa alojado en la comisaría aunque en una celda más pequeña.
Por seguridad, los reclusos fueron retirados por el cuerpo de infantería y llevados a otras dependencias policiales.
Cabe apuntar que estos presos (la mayoría con proceso), están a cargo del área de Judiciales.
El martes a la noche, pasadas las 18.30, efectivos policiales lograron evitar una fuga masiva de ocho presos de la seccional 55 del barrio Los Perales.
Estaban realizando un boquete en una de las paredes de la celda que da a las márgenes de un riachuelo y estaban a centímetros de lograr su objetivo.
Aparentemente, un efectivo se percató de tierra removida en uno de los calabozos así que decidió profundizar la inspección y se dio con el boquete aún no terminado.
Se investiga si esto fue realizado o no con algún elemento contundente proporcionado por alguno de los familiares de los presos durante los horarios de visita.