El intendente de Río Gallegos, el kirchnerista Raúl Cantín, renunció ayer a su cargo en medio de una protesta de empleados municipales que ya lleva 124 días, aunque adujo que tomó la decisión por "estrictas razones de salud y personales".
"En el texto elevado al Concejo Deliberante plasmé que la determinación que tomé obedecía a estrictas razones de salud y personales que me impiden seguir cumpliendo con las fundamentales tareas que el cargo requiere en el sistema democrático, representativo de la voluntad y decisión de los integrantes de la comunidad", afirmó el saliente jefe comunal en un comunicado. Tras presentar su renuncia "indeclinable", Cantín negó que le hayan pedido que abandone el cargo y agradeció el "acompañamiento permanente del Gobierno nacional y de todos los compañeros del justicialismo en este tiempo y sobre todo en los difíciles momentos de estos últimos tres meses y las secuelas que ello acarreó".
"Nadie me pidió la renuncia", subrayó el dirigente santacruceño, al tiempo que envió sus "disculpas a todos los vecinos por los errores cometidos, esperando que otros hagan lo mismo".
En su comunicado, Cantín se refirió al conflicto con el Sindicato de Obreros y Empleados Municipales (Soem) que lleva 124 días de paro por el reclamo de un 15% de aumento adeudado de la paritaria 2014: "A lo que comenzó como un reclamo salarial de imposible cumplimiento discutido en paritarias, hicimos una propuesta que se sumaba al 26,5% establecido para todos los municipios de nuestra provincia, pero con el paso del tiempo entraron a tallar otras razones, porque aparecieron las mezquindades políticas en este momento electoral en el que parece que todo vale, incluso actos de agresión entre vecinos y la nacionalización de la campaña, como pudimos ver con mucha tristeza".
Sin embargo, el ahora exintendente aseguró que hace "una profunda autocrítica" de su gestión y admitió que "llegar a esta situación no es exclusiva responsabilidad de una de las partes". "He tomado decisiones que, aunque bien intencionadas, resultaron equivocadas y fueron acumulando problemas y generando conflictos, pero fueron mis decisiones y me hago cargo", manifestó.
El próximo lunes se llevará a cabo la sesión extraordinaria del Concejo Deliberante en la que el presidente de ese cuerpo, Pablo Grasso, asumirá al frente de la comuna para finalizar el mandato.
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El intendente de Río Gallegos, el kirchnerista Raúl Cantín, renunció ayer a su cargo en medio de una protesta de empleados municipales que ya lleva 124 días, aunque adujo que tomó la decisión por "estrictas razones de salud y personales".
"En el texto elevado al Concejo Deliberante plasmé que la determinación que tomé obedecía a estrictas razones de salud y personales que me impiden seguir cumpliendo con las fundamentales tareas que el cargo requiere en el sistema democrático, representativo de la voluntad y decisión de los integrantes de la comunidad", afirmó el saliente jefe comunal en un comunicado. Tras presentar su renuncia "indeclinable", Cantín negó que le hayan pedido que abandone el cargo y agradeció el "acompañamiento permanente del Gobierno nacional y de todos los compañeros del justicialismo en este tiempo y sobre todo en los difíciles momentos de estos últimos tres meses y las secuelas que ello acarreó".
"Nadie me pidió la renuncia", subrayó el dirigente santacruceño, al tiempo que envió sus "disculpas a todos los vecinos por los errores cometidos, esperando que otros hagan lo mismo".
En su comunicado, Cantín se refirió al conflicto con el Sindicato de Obreros y Empleados Municipales (Soem) que lleva 124 días de paro por el reclamo de un 15% de aumento adeudado de la paritaria 2014: "A lo que comenzó como un reclamo salarial de imposible cumplimiento discutido en paritarias, hicimos una propuesta que se sumaba al 26,5% establecido para todos los municipios de nuestra provincia, pero con el paso del tiempo entraron a tallar otras razones, porque aparecieron las mezquindades políticas en este momento electoral en el que parece que todo vale, incluso actos de agresión entre vecinos y la nacionalización de la campaña, como pudimos ver con mucha tristeza".
Sin embargo, el ahora exintendente aseguró que hace "una profunda autocrítica" de su gestión y admitió que "llegar a esta situación no es exclusiva responsabilidad de una de las partes". "He tomado decisiones que, aunque bien intencionadas, resultaron equivocadas y fueron acumulando problemas y generando conflictos, pero fueron mis decisiones y me hago cargo", manifestó.
El próximo lunes se llevará a cabo la sesión extraordinaria del Concejo Deliberante en la que el presidente de ese cuerpo, Pablo Grasso, asumirá al frente de la comuna para finalizar el mandato.