La secretaria general de la Confederación de Trabajadores de la Educación (Ctera), Sonia Alesso, calificó de "parazo nacional" a la huelga docente de 48 horas iniciada ayer, que impidió el inicio de las clases en la mayoría de las escuelas públicas de gestión estatal del país, y reclamó al Gobierno que convoque "con urgencia" a la paritaria federal docente, durante un acto realizado por las cinco confederaciones gremiales del sector frente al Ministerio de Educación de la Nación.
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La secretaria general de la Confederación de Trabajadores de la Educación (Ctera), Sonia Alesso, calificó de "parazo nacional" a la huelga docente de 48 horas iniciada ayer, que impidió el inicio de las clases en la mayoría de las escuelas públicas de gestión estatal del país, y reclamó al Gobierno que convoque "con urgencia" a la paritaria federal docente, durante un acto realizado por las cinco confederaciones gremiales del sector frente al Ministerio de Educación de la Nación.
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"A ver si (el ministro de Educación Esteban) Bullrich ahora escucha", dijo Alesso, acompañada por los cánticos de miles de manifestantes frente al Palacio Pizzurno, sede de la cartera educativa nacional.
El paro docente tuvo una alta adhesión en Buenos Aires, Santa Fe y Córdoba, con niveles cercanos al 80 por ciento, y sólo en las provincias de Santiago del Estero y San Luis se inició el ciclo lectivo 2017 con normalidad, mientras en Tucumán hubo acuerdo salarial pero el Gobierno postergó el inicio de clases para el miércoles.
Las dos jornadas de paro fueron convocadas por los sindicatos nacionales junto con una movilización a la Ciudad de Buenos Aires que tuvo una alta participación de docentes de todo el país.
En provincia de Buenos Aires, el Frente Gremial Docente estimó en un 90% la adhesión a la huelga, principalmente en escuelas públicas, aunque tuvo un menor impacto en los colegios privados.
Mirta Petrocini, titular de FEB, remarcó que "más allá de una clara campaña de desprestigio hacia los docentes, tenemos claro que la propuesta que hicieron las autoridades bonaerenses es inaceptable por donde se la mire".
En Córdoba, la medida de fuerza tuvo una "elevada" adhesión docente, según indicó el secretario de la Unión de Educadores de la Provincia de Córdoba, Juan Monserrat, y el ministro de Educación provincial, Walter Gradhovac, advirtió que el día de huelga será descontado.
El funcionario convocó a una nueva reunión para mañana y anticipó que la oferta seguirá el "mismo criterio" que con los demás empleados públicos: aumento del 19,5% en dos tramos, el 12,5% en febrero y el 7% en julio.
En Santa Fe, el paro se cumplió con un elevadísimo acatamiento cercano al 90 por ciento, en las instituciones públicas, ya que en las privadas hubo más actividad.
En Tucumán se dio una situación muy particular: no hubo clases pero no por el paro porque la situación salarial ya estaba acordado, sino porque el Gobierno postergó el inicio hasta mañana.
Los docentes de esa provincia aceptaron una oferta salarial del 23% anual: 12 % en marzo y el 11 % en septiembre, que está compuesta por una mejora del 18% por este año y del 5% del 2016.
En Mendoza, el gobernador Alfredo Cornejo aseguró que fue un "fracaso" el paro y estimó que el acatamiento se ubicó por debajo del 7 por ciento.
Por el contrario, En Neuquén, el acatamiento se disparó al 90 por ciento y los docentes contaron con el apoyo de los afiliados a ATE.
En Santa Fe, fue elevada la adhesión a la medida de fuerza en las escuelas públicas, y en las privadas hubo actividades alternativas.
En Misiones, los gremios docentes se adhirieron al paro aunque hubo un acuerdo: la negociación se cerró una mejora del 13%, y en La Pampa, los docentes realizaron una marcha y los dirigentes estimaron una adhesión al 90 por ciento. En Corrientes, una adhesión en un 20 por ciento.