Todavía pareciera que sus inicios fueran de reciente data, pero viendo los años transcurridos, han pasado 50 años de devoción y mucha fe con adoraciones al son de villancicos en cada Navidad. Se trata de 50 años del reconocido pesebre "Ovejitas de Belén" donde siguen pasando generaciones de niños y adolescentes adoradores, todo por el compromiso de fe de la familia Cussi.
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Todavía pareciera que sus inicios fueran de reciente data, pero viendo los años transcurridos, han pasado 50 años de devoción y mucha fe con adoraciones al son de villancicos en cada Navidad. Se trata de 50 años del reconocido pesebre "Ovejitas de Belén" donde siguen pasando generaciones de niños y adolescentes adoradores, todo por el compromiso de fe de la familia Cussi.
Desde 1968 surgió este grupo de la mano de doña Rosario Vilte y don Gumersindo Cussi a raíz de una promesa que confiaron al Niñito Jesús luego de un infortunio familiar. Desde esa fecha lograron alegrar a muchos niños con acciones solidarias y benéficas.
Para la ocasión montaron una escenografía impresionante en las instalaciones del club Belgrano ubicado en el barrio Provincias Argentinas de Abra Pampa. Fue elegido ya que por sus dimensiones no era posible en el lugar de ediciones anteriores. Es que todos los años se suma una gran cantidad de chicos y en esta ocasión la concurrencia llegó a 80 niños y adolescentes que recorrieron diferentes hogares.
La familia renueva los esfuerzos para que esta tradición se mantenga, formando una comisión y este año fue encabezada por Daniel Cruz y su esposa. Fue así que recientemente festejaron sus Bodas de Oro con un programa cargado de actividades y una fogata al frente del salón con la actuación de Ítalo Ramos y su conjunto, al son de villancicos recibiendo el 3 de enero con fuegos artificiales y adoraciones de todos los presentes y al día siguiente con la misa de acción de gracias y el encuentro de pesebres confraternizando con los de "Pastorcito del Niño Manuelito" (Abra Pampa) y "Niñito Jesús" (Agua de Castilla).
En cuanto a la génesis del pesebre "Ovejitas de Belén" vale señalar que se remonta hacia el año 1968.
Pero antes de esa hermosa historia existe un por qué.
Era el año 1967 en la localidad de Mina Aguilar, en la casa de don Gumersindo y doña Rosario cuando uno de sus hijos (Oscar), en la tarde del 8 de julio de 1967 jugaba en el basural (cenizas supuestamente apagadas). El pequeño saltaba en la región de las cenizas, pisó un lugar donde abajo estaba encendido, quemándose el pie derecho totalmente, de tal manera que cuando lo llevaron al médico, tras pasar los días la única solución que les dio el doctor fue amputarle el pie, ya que estaba muy delicado, había pasado mucho tiempo y no se recuperaba.
Doña Rosario ("Charito") con ese inmenso dolor y por recomendaciones visita a doña Justa Flores ("Cucusa") quien tenía una imagen del Niñito Jesús al que se le adoraba. La señora Justa le propone a doña "Charito" y a don Gumersindo promesarse al Niño Jesús y adorarlo; fue así que ellos se promesaron, para adorarlo y rezar hasta sus últimos días, si lograba salvar el pie de su hijo pequeño. El Niño Jesús cumplió su promesa, su pie empezó a recuperarse y no lo amputaron.
Al año siguiente en diciembre de 1968 armaron el pesebre en la corrida 41 casa 4, en donde se llamaba "Madera del horizonte", posteriormente se cambió de domicilio a la corrida 34 casa 2 y pasó a llamarse "Estrellas de Belén". En 1989 la familia Cussi se va de Mina Aguilar por jubilación de don Gumersindo, trasladándose a Abra Pampa, en ese tiempo también se cambió de nombre el pesebre, ya que existía otro con el mismo, fue entonces que adquirió el nombre de "Ovejitas de Belén".
Hasta hoy siguen cumpliendo su promesa. Adorando, no tan solo sus hijos, sino generaciones posteriores, en este tiempo la cuarta estirpe. Evidentemente los rumbos van cambiando y los caminos de Dios tienen a cada integrante pero el objetivo es llevar una sonrisa a los olvidados.