Se restableció ayer la provisión de agua potable en cuatro barrios capitalinos, los cuales no tuvieron servicio por un día debido a la rotura de un acueducto.
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Se restableció ayer la provisión de agua potable en cuatro barrios capitalinos, los cuales no tuvieron servicio por un día debido a la rotura de un acueducto.
La rotura del acueducto se produjo en el asentamiento San Pablo del barrio Cuyaya, por lo que viviendas del mismo tuvieron que ser demolidas y sus ocupantes desalojados, para permitir la reparación del mismo.
Los barrios Cuyaya, Mariano Moreno, Castañeda y Alto Gorriti habían quedado sin suministro del líquido elemento en la mañana del lunes, mientras que en otros sectores hubo baja presión.
Desde Agua Potable de Jujuy informaron que en la madrugada de ayer terminaron con las reparaciones, pero de todos modos pidieron paciencia a los usuarios ya que la normalización del servicio podría demorar en algunos sectores.
El presidente de Agua Potable SE, Víctor Galarza, había explicado que si bien la rotura se produjo cerca de las 6 de la mañana, las tareas de reparación se vieron demoradas debido a que las familias ubicadas en el asentamiento se negaban a ser desalojadas. "Comenzamos a trabajar recién a las 15 (del lunes), luego de que interviniera personal de Defensa Civil, Ordenamiento Territorial y Bomberos para la evacuación de las familias, ya que se debieron derrumbar algunas viviendas que estaban encima del acueducto", señaló.
En el lugar se dispuso un importante operativo en el que trabajaron numerosas maquinarias, ya que se debió excavar más de 7 metros para encontrar la fisura, además de demoler algunas viviendas.
Pese a que se desconocía el tiempo que demandaría la reparación, Galarza estimó que el servicio se restablecería ayer. Igualmente la empresa asistió a los sectores afectados distribuyendo agua con camiones.
El titular de Agua Potable también había asegurado que las familias ubicadas sobre el acueducto corren riesgo, por lo que deben desalojar el lugar.
Al tiempo de indicar que el asentamiento era "ilegal", señaló que "al hacer los pozos ciegos en las viviendas, los caños terminan cediendo por el peso; podría haber ocurrido una desgracia ya que el acueducto es grande, contiene mucha cantidad de agua y reventó justo abajo de las viviendas. Es imperioso que se evacúe éste y otros asentamientos como el de Los Huaicos, donde hay acueductos que se rompen".