La familia Cisneros del barrio Santa Bárbara A de Palpalá, junto a vecinos y devotos de la Virgen de Urkupiña, ayer disfrutaron de una jornada festiva en el salón del Club Altos Hornos Zapla, en el que compartieron un almuerzo para agradecer a la santa imagen originaria de Quillacollo (Bolivia).
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La familia Cisneros del barrio Santa Bárbara A de Palpalá, junto a vecinos y devotos de la Virgen de Urkupiña, ayer disfrutaron de una jornada festiva en el salón del Club Altos Hornos Zapla, en el que compartieron un almuerzo para agradecer a la santa imagen originaria de Quillacollo (Bolivia).
En la mañana, bien temprano, se realizó una misa en la capilla Los Beatos del barrio Carolina, para posteriormente la imagen y los presentes visitar a la familia Yurquina, donde compartieron un desayuno y la actuación de conjuntos de saya y una banda de música que deleitaron a todos los presentes, un centenar de personas aproximadamente.
Previo a esto, en el domicilio de la familia Cisneros se realizó la tradicional novena, que contó con una gran participación de devotos, quienes año tras año se suman y reivindican su fe a la Virgen de Urkupiña.