En Jujuy, en los últimos tiempos se ha extendido otras alternativas de hacer turismo, de la mano del deporte, gracias a grupos que expresando el sentido de pertenencia aman la actividad física, sobre todo aquellas prácticas que producen descargas de adrenalina. Así los paisajes de nuestra provincia cuentan con escenarios que son óptimos para sandboarding, trail runnig, mountain bike, escaladas, parapente, etc.
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En Jujuy, en los últimos tiempos se ha extendido otras alternativas de hacer turismo, de la mano del deporte, gracias a grupos que expresando el sentido de pertenencia aman la actividad física, sobre todo aquellas prácticas que producen descargas de adrenalina. Así los paisajes de nuestra provincia cuentan con escenarios que son óptimos para sandboarding, trail runnig, mountain bike, escaladas, parapente, etc.
Uno de los grupos más relevantes del extremo norte de la patria es Puna Extreme, a quienes contactamos para saber en particular sobre sandboard.
El sandboard es un deporte extremo que consiste en realizar un recorrido descendente por laderas de cerros o montañas de arena, deslizándose sobre una tabla especialmente diseñada para tal fin.
Este deporte entra en la categoría de extremo, ya que produce grandes descargas de adrenalina y por los peligros que implica caerse de una de estas tablas en pleno recorrido.
Se practica sobre una limitada variedad de superficies arenosas, en principio donde haya dunas de arena.
Tiene las mismas líneas de acción que el snowboarding, es decir uno mismo puede definir el estilo que quiere desarrollar.
Quiénes pueden practicarlo
Los referentes de Puna Extreme nos contaron que tanto chicos de 4 ó 5 años que pueden utilizar tabla, también lo puede hacer un adulto mayor siempre y cuando cumpla con las medidas de seguridad.
Para aquellas personas que dominan el skate o el surf le es mucho más fácil hacer sandboard ya que técnicamente los movimientos son muy similares, pues se apoyan los pies de la misma manera y la presión para realizar los trucos es la misma.
Aunque incluso si no se tiene una mínima experiencia, no hay mucho de qué preocuparse, porque este deporte, pese a tener el calificativo de "extremo", es muy sencillo de aprender, debido a que la arena es mucho más densa que la nieve y más aún que el agua. De manera que por lo general los descensos son más rectos. Obviamente a medida que se vaya acumulando experiencia se podrán hacer giros, saltos y hasta trucos complejos.
La tabla
Las tablas que se utilizan para este deporte contienen dos "agarraderas", quedando ambos pies sujetados a la superficie para poder maniobrar con mayor facilidad sin perder el dominio. Al ser la arena una superficie irregular, los pozos hacen que el sandboard sea apasionante y se produzca un efecto parecido al que provocan las olas al romper. Es menos riesgoso para los principiantes, aunque es importante contar con un supervisor y guiado por un instructor.
Vale destacar que en Jujuy hay un emprendimiento llamado Malón que se dedica a fabricar tablas de sandboard y son las que el equipo de Puna Extreme utiliza en sus actividades.
Atractivo turístico
Uno de los principales atractivos de este deporte es la apreciación de la naturaleza y los paisajes ya que cada lugar cuenta con una historia y una belleza particular. Sin mencionar que es una forma bonita de conocer otras culturas y llevarse muchos recuerdos.
Para los que conforman Puna Extreme ésta es una premisa ineludible a la hora de proyectar sus actividades, porque conjugan deporte y turismo, generando en este maravilloso paisaje, un espacio de intercambio entre los productores locales y los visitantes ávidos de nuevas experiencias.
Y en lo netamente deportivo, lo que se busca con la promoción de la práctica del sandboard es desarrollar la actividad a un nivel competitivo e internacional teniendo en cuenta que Jujuy posee unas dunas de 400 metros de desnivel como la del Huancar. Teniendo en cuenta que en Argentina se clasifica solamente un atleta al mundial que se hace en Perú.
Invitación
El próximo sábado 7 de septiembre Puna Extreme desarrollará esta actividad que no es de carácter competitiva, sino que se apunta a dar a conocer este deporte a aquellos que estén interesados en vivir una experiencia diferente, o también para aquellos que ya tienen más práctica.
La actividad está dividida en dos partes, por la mañana los instructores enseñarán medidas de seguridad, posición, cómo caer, y se hacen pequeños deslizamientos, y por la tarde se realizarán los descensos más prolongados. Cabe destacar que existe un cupo de 30 personas y las inscripciones se reciben hasta el día 6.