Tilcara volvió a ser elegida por los turistas el fin de semana largo. Uno de los termómetros de la actividad es la opinión de las mujeres que venden tortillas asadas junto al Hotel de Turismo. “Hasta ahora, flojo”, dijeron ayer al mediodía, “pero va a haber mucha gente por la tarde”, agregaron con una sonrisa de optimismo, que es el que reina en Tilcara.
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Tilcara volvió a ser elegida por los turistas el fin de semana largo. Uno de los termómetros de la actividad es la opinión de las mujeres que venden tortillas asadas junto al Hotel de Turismo. “Hasta ahora, flojo”, dijeron ayer al mediodía, “pero va a haber mucha gente por la tarde”, agregaron con una sonrisa de optimismo, que es el que reina en Tilcara.
En el museo “Soto Avendaño”, que tiene sus puertas abiertas, dijeron que ayer se le sumaron al turismo jujeño visitantes entrerrianos, salteños y porteños. Se habla de hoteles con las camas ocupadas, pero hay que esperar uno o dos días para conocer las estadísticas. Hasta este fin de semana, Tilcara tuvo movimiento desde el sábado por la tarde hasta el domingo, ahora hay dos días más y habrá que ver el comportamiento del público, que no suele estar reservando con anticipación.
Diciembre empieza a sonreír y hay motivos si se fortalece el movimiento económico, pero los puesteros de la plaza hablan de más gente que compran y los remiseros de pocos viajes a los sitios atractivos. Varios concuerdan en que aunque el movimiento económico beneficie a los hoteles y los restoranes, ese dinero ya será parte de la circulación local. Un menú ofrece un sustancioso estofado de cordero con sopa y postre por $ 300, y de ahí para arriba. Las empanadas siguen a $25 en el mercado y a $60 en un restorán con buen número de comensales.