El Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (Incaa) presenta en la plataforma Cine.Ar Play el documental titulado "Vilca, la magia del silencio", realizado por Ulises De la Orden y Germán Cantore. Este último, en contacto con El Tribuno de Jujuy, se refirió al filme que hoy se poder ver gratis en la plataforma Cine.Ar Play.
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El Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (Incaa) presenta en la plataforma Cine.Ar Play el documental titulado "Vilca, la magia del silencio", realizado por Ulises De la Orden y Germán Cantore. Este último, en contacto con El Tribuno de Jujuy, se refirió al filme que hoy se poder ver gratis en la plataforma Cine.Ar Play.
La película es un emotivo homenaje a trayectoria profesional y a la personalidad sencilla, sabia y sincera del maestro humahuaqueño Ricardo Vilca, artista ejemplar del norte cuya música se constituye como patrimonio cultural de nuestra provincia. A lo largo del metraje familiares, amigos, periodistas y colegas ponen en valor la figura del jujeño que en su obra supo reflejar una poética que se fundía con el paisaje quebradeño y en la que se distinguía su naturaleza generosa y profunda.
Ricardo Vilca quizá no tuvo tiempo de alcanzar mayor trascendencia entre el público masivo, pero esta película sirve como testimonio del paso por este mundo de un músico entrañable que sigue vivo en el recuerdo de todos los jujeños.
¿Cómo surge la idea de este proyecto?
La idea es bastante antigua, surge en el año 2002 cuando lo conocemos a Ricardo (Vilca) porque él hizo la música para el filme "Río Arriba", el primer documental de Ulises de la Orden (ya tiene más de diez) donde yo participaba como editor. Y nos atrajo el personaje y su música. Entablamos una amistad, con las distancias del caso, pero con confianza. Luego pensamos en hacer el documental y empezamos a seguirlo grabando cuando íbamos a Jujuy o cuando él venia a Buenos Aires. Llegamos a juntar 25 horas de material entre el 2002 hasta el 2007.
La idea era conseguir financiación para terminar el filme con un rodaje profesional pero ese momento nunca llegó y nos sorprendió su muerte. Nadie esperaba que Ricardo falleciera tan joven y ahí nos quedó ese material y las ganas. Pasaron 10 años en los que cada tanto intentamos retomar el proyecto pero por una razón u otra nunca sucedida y en el 2016/ 17 nos decidimos. Presentamos el proyecto al Incaa, obtuvimos la aprobación y en el 2018 fuimos a filmar a Jujuy, también en Córdoba y Buenos Aires hicimos algunas entrevistas.
En todo este proceso ¿qué aspectos de la vida de Ricardo Vilca le llamó más la atención?
A Ricardo (Vilca) lo conocimos bastante y creo que principalmente apreciamos su forma de ser, era muy agradable, muy divertido y ocurrente todo el tiempo. Él era un genio, realmente un genio, pero al mismo tiempo era un tipo muy humilde y compartir cosas con él era muy sencillo. Y lo que transmitía en vivo con su música, también era asombroso.
¿Cree que Ricardo Vilca no fue reconocido como se merecía?
Yo creo que siempre tuvo que pelearla, porque inclusive en la misma Humahuaca al principio su música no era bienvenida. Le costaba conseguir lugares donde tocar porque su planteo fue de vanguardia. De a poco fue llegando Buenos Aires y a otros lugares del país y con su peña tuvo un espacio propio donde no se discutía lo que se hacía y por ahí pasaba gente de todo el país. Escuchar su música realmente te deja atravesado y todo el mundo que lo oía llevaba esas melodías adentro. Y músicos famosos comenzaron a tocar sus temas y se hizo más conocido en Buenos Aires.
Desgraciadamente partió cuando su carrera estaba en un muy buen momento con muchísimo crecimiento y difusión. Yo creo que si él hubiera seguido viviendo hubiera alcanzado un nivel de reconocimiento mucho mayor. Espero que la película ayude a se lo conozca más. Además hay que tener en cuenta que él eligió quedarse en Humahuaca, era lo que necesitaba, para nutrirse musicalmente de su tierra, para componer. Hasta sus últimos días su elección fue quedarse con su lugar, con su gente y eso es muy valioso, pero le costó que su difusión sea mucho más lenta.
¿Qué recuerdos tiene de Ricardo Vilca y de Jujuy en particular?
De Ricardo el mejor de los recuerdos. Yo no conocía Jujuy hasta que lo conocí, por él conocí la Quebrada, Jujuy y Ricardo están ligados para mí. Después que falleció en 2007 seguí visitando la provincia, fui varias veces y son unos años muy intensos y lindos de descubrir esa cultura, ese lugar que está a más de 2.000 kilómetros de Buenos Aires, un sitio totalmente distinto.
¿Qué reflexión puede hacer teniendo en cuenta este contexto de pandemia que atravesamos y la actividad audiovisual?
A la industria audiovisual la pandemia le pegó muy duro, no hay rodajes, los cines están cerrados y el Instituto de Cine se financia en gran medida por los impuestos a las entradas, entonces no se puede financiar el Incaa. No hay trabajo y va a tardar bastante la reactivación de la actividad. Pero debemos tener en cuenta que estamos viviendo un momento único en la historia del planeta, todo el mundo está afectado. Hay que ser conscientes de eso y cuidarse y veremos cómo se sale.
¿Cómo vive este estreno que no pudo ser en salas sino por medio de la plataforma Cine.Ar?
La expectativa es que pueda llegar a la gente, de todas maneras no renunciamos a la idea de poder estrenar en salas. La película tiene una imagen y un sonido que sólo pueden lucirse adecuadamente en un cine, no es lo mismo ver el documental en una pantalla de TV o en una computadora y la experiencia colectiva tampoco se puede replicar. Así que no desistimos de la idea y cuando haya posibilidades concretas esperamos estrenar en sala. De hecho en algún momento analizamos llevar la película en San Salvador de Jujuy, cuando allá tenían poco casos pero el tema de la pandemia se complicó. Así que decidimos aprovechar esta posibilidad que nos brinda el Incaa y en la medida que la pandemia lo permita esperamos empezar a mostrar la película en salas.