En el día uno, el festival de música más importante del país comenzó con espectáculos de primer nivel junto a artistas locales y e internacionales además de las actividades recreativas y gratuitas dentro del predio.
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En el día uno, el festival de música más importante del país comenzó con espectáculos de primer nivel junto a artistas locales y e internacionales además de las actividades recreativas y gratuitas dentro del predio.
Día caluroso y sofocante con 32º en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, paro de algunos colectivos y cierre del tren de Retiro y algunos subtes por obras que llevaban directo al Hipódromo de San Isidro. Sin embargo existían otras alternativas de llegar desde la Estación Belgrano. Las puertas se abrieron a las 11:30 de la mañana listas para recibir al público en su primer día con una cola de fanáticos que van con looks particulares llenos de colores que avanza velozmente y un control riguroso. Se debe caminar alrededor de quince minutos más con inflables, banderas con los logos y banderas de países donde se realiza también el festival que guían a cada momento hasta por fin entrar al Lollapalooza, el festival de música con espectáculos de primer nivel.
Lo primero que se encuentra al ingresar al Hipódromo son los puntos de cargas “Lollacashless”, una forma creativa de poder pagar los merchandising y productos gastronómicos y al lado una gran rueda gigante completamente gratis junto a actividades recreativas como maquillaje, peinados, escenarios para sacarse fotografías con motocicleta, instrumentos, 360º y demás. También hay diversos puntos de hidratación que ayudan a combatir el calor y calmar la sed.
El evento cuenta con cuatro escenarios principales; Flow, Samsung, Alternative y Perry; ubicados estratégicamente para que ningún artista interrumpa al otro que está en simultáneo y también pequeñas “casitas” de djs con diversos ritmos para el gusto de todos. Para las infancias existe otro escenario llamado “Kidpalooza” con propuestas recreativas como clases de batería, freestyle, biker y skate y espectáculos musicales como lo fue el “Coro Talento” quienes interpretaron covers de Bandana, Luis Miguel entre otros dando más color para toda la familia.
Si lo que uno busca es relajarse y esperar tranquilo al artista que fue a ver específicamente, existe “Espíritu Verde”, un sector dedicado a promover el cuidado ambiental y así estimular el estilo de vida con eco-bicis que reciclan botellas cuando se pedalea, zona de masajes, clases de yoga, mural recreativo, espacio de pintura en vivo y zona de relax con sillones reconfortables.
El día uno estuvieron en vivo artistas de renombre como Dante Spinetta quien invitó al rapero Trueno para cantar juntos su canción “Sudaka” en el escenario Flow, donde más tarde el boquense dio su propio show en el escenario Samsung cerrando su tour “Bien o mal”, en el mismo escenario se encontraba la artista Noruega Aurora Aksness quien volvió al país una vez más y se ganó los corazones de los espectadores con sus melodías y bailes.
Por otro lado el cantautor argentino Chano Charpentier se despidió de los escenarios con su último show en el festival con la sorpresa de tener de invitados a sus ex compañeros de Tan Biónica haciendo llorar a todos sus fanáticos con los grandes cásicos de la banda prometiendo volver.
Casi terminando la jornada, la española Rosalía dio su paso volviendo al país en tan solo siete meses con un show renovado exclusivo para festivales haciendo cantar y bailar a todos los presentes con la particularidad de que volvió a leer el cartel de “vas en contramano” siendo así que respondió a la fanática con los pasos de Fabián Show diciendo “ya no, ya no” haciendo reír a todos en el lugar.
Le siguió el rapero Drake que tuvo inconvenientes con los espectadores de la plataforma Flow que no pudieron ver el show ya que el artista decidió no transmitir su presentación a último momento y terminar antes de lo pautado. Sin embargo, recordó a la scaloneta y a los campeones del mundo al ritmo de “Muchachos” , covers y canciones propias.
Al finalizar la joranda, el dj Armin Van Buuren hizo bailar hasta el último minuto con la mejor música electrónica, show de luces láser, fuegos artificiales y la bandera argentina plasmada en las pantallas agradeciendo al público local por el cariño y el recibimiento de siempre.
El festival continuó los días siguientes con las figuras de Twenty One Pistols quien reemplazó a Blink 182 y también hizo cantar a los campeones del mundo y como cierre final a Billie Eislish, la cantante californiana de 21 años, quien se presentó por primera vez en la Argentina con una gran expectativa en el escenario.
El Lollapalooza es un festival de música que inició en 1991 con Perry Farrell, cantante de Jenny’s Adiction, que siguió anualmente hasta 1997 y se reanudó en 2003 con espectáculos de ritmos de rock alternativo, indie y punk rock con danza y actuaciones cómicas. Para 2011 el evento se traslada por primera vez en Chile, al año siguiente en Brasil y luego a la Argentina recién 2014 con la visita de los Red Hot Chili Peppers, Arcade Fire, Sound Garden y Nine Inch Nails como artistas principales.