Las elecciones Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (Paso) dejaron algunos sabores, para algunas personas sorpresa, angustia y gran alegría para los simpatizantes del ganador, como ocurre en todas las elecciones, pero en esta última elección resultó diferente, porque apareció en escena un contrincante llamado Javier Milei, que se lo veía venir, pero no parecía tan cercano y finalmente surge de las Paso, entre los partidos tradicionales, como primer preclasificado para las elecciones finales del mes de octubre. El tema es si realmente es una sorpresa, porque el descontento de la mayoría de la sociedad, por las acciones políticas de los diferentes partidos políticos, se percibe desde hace bastante tiempo.
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Las elecciones Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (Paso) dejaron algunos sabores, para algunas personas sorpresa, angustia y gran alegría para los simpatizantes del ganador, como ocurre en todas las elecciones, pero en esta última elección resultó diferente, porque apareció en escena un contrincante llamado Javier Milei, que se lo veía venir, pero no parecía tan cercano y finalmente surge de las Paso, entre los partidos tradicionales, como primer preclasificado para las elecciones finales del mes de octubre. El tema es si realmente es una sorpresa, porque el descontento de la mayoría de la sociedad, por las acciones políticas de los diferentes partidos políticos, se percibe desde hace bastante tiempo.
En cada elección la ciudadanía concurre a las urnas con la esperanza de que tal vez el nuevo gobierno cambie el eje político para beneficiar a todos los argentinos. El gobierno "ganador" comienza su gestión, al comienzo el eje parece moverse, con el paso del tiempo el eje vuelve a su posición donde siempre estuvo. El problema en nuestro país es como una película que la vemos siempre, existe la expresión en las urnas con mayoría de votos, por ejemplo para un partido político porque la sociedad considera que es el indicado para salir de la crisis política, social y económica en la que siempre estamos inmersos. Pero existen grupos minoritarios de la sociedad, algunos instalados desde hace muchos años y son los que en definitiva les marcan la cancha a los gobiernos, y algunos de ellos se encaminan por los reclamos de esas minorías descuidando a la mayoría de ciudadanos que les dieron el voto.
Con los gobiernos de Argentina, hasta ahora, llegamos a un sistema difícil de salir. Se convoca a elecciones democráticamente, luego los ciudadanos observan cómo su voto solo sirvió para posicionar en un cargo a un político que no puede o no quiere desprenderse de grupos minoritarios que fijan en gran parte los lineamientos políticos en nombre del pueblo.
En esa crisis de la sociedad, que no avizora un horizonte, aparece un señor llamado Milei y propone destruir el sistema cueste lo que cueste y hacer algo nuevo, distinto, pensando en el país que sueña la sociedad. La gente ve a alguien que le genera esperanzas, tal vez resulte peor a todos, pero también es el único que demuestra decisión y en la desesperación la gente apuesta a un modelo distinto.
En el caso de ganar las elecciones generales, Milei tendrá que recurrir a todos los recursos disponibles para frenar a los grupos minoritarios que al día siguiente estarán reclamando en nombre del pueblo conquistas obtenidas y lucharán para no romper un sistema que llevó años construir.
En Juntos por el Cambio, Patricia Bullrich superó a Larreta, el otro precandidato a presidente. La lectura de esta otra sorpresa también sería el resultado de la disconformidad de los ciudadanos, porque Bullrrich habló de cambios profundos en su posible gobierno, pero fue menor que el plan motosierra de Milei.
Con la reforma parcial de la Constitución provincial jujeña, aprobada su tratamiento con voto de la mayoría de los ciudadanos, fue duramente cuestionada por grupos minoritarios, llegando al punto de prácticamente sitiar la provincia. Si algunas personas consideran los sucesos ocurridos en Jujuy con la reforma parcial de la Constitución provincial como un experimento de laboratorio para luego ser aplicado por Juntos por el Cambio si llega al Gobierno, ahora con el precandidato Milei si llega al Gobierno nacional en el mes de octubre, no será posible hablar de un experimento de laboratorio, porque seguramente será un experimento a escala industrial. Algunas minorías ya están abriendo el paraguas, ¿permitirán que un gobierno ponga un punto bisagra en octubre?