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El desplazamiento del jefe de la Fuerza Aérea Argentina (FAA), brigadier Fernando Luis Mengo, generó un escándalo dentro de la fuerza y del Ministerio de Defensa, ya que las acusaciones en su contra debido al "uso indebido de aeronaves de la institución" en 32 ocasiones y a presuntos casos de acoso en esa cartera estarían confirmadas.
Fuentes oficiales revelaron que la acusación de una mujer contra Mengo "no sería la única". Pero además, "toda denuncia de este tipo queda a cargo de la Dirección Nacional de Inteligencia Estratégica Militar (Dniem) y es esta área la que avanza con la investigación. Pero en estos casos el director de la Dniem, Marco Alberto Constenla, habría ordenado cajonear estas causas debido a la amistad con Mengo", precisaron.
Constenla junto con su antecesor en la Dniem Francisco Javier Moliterno y otros "amigos" del jefe de la Fuerza Aérea viajaban juntos en helicópteros oficiales a Entre Ríos a disfrutar de asados y otras actividades.
Usar una aeronave de la FAA para viajes de placer está prohibido y fue una de las causas por las cuales el ministro de Defensa, Luis Petri, desplazó a Mengo. De hecho, habría varios videos de seguridad en los cuáles se los ve partir con rumbo a esa provincia. Asimismo, el ahora exjefe de la Fuerza Aérea también usaba aviones oficiales para trasladar amigos y familiares a otras provincias para "pasear y hacer turismo".
La amistad de Mengo y Constenla habrían generado que este último lo cubriera en las denuncias por presunto abuso sexual o acoso, por lo que ninguna de ellas avanzaba.
Sin embargo, una mujer de la fuerza, al ver que no prosperaba su demanda, y sabiendo de la amistad y otras cuestiones (se habla de acuerdos comerciales), decidió ir directamente a contar su caso a funcionarios de la gestión de Javier Milei y de allí se lo comunicaron a Petri, quien tomó la decisión de desplazarlo.