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El partido de Silvio Berlusconi sufrió ayer una derrota histórica en la región de Sicilia, bastión de la derecha, y contra todos los pronósticos eligió como gobernador al candidato de izquierda, gay declarado y emblema antimafia, mientras el movimiento antisistema “Cinco estrellas”, tuvo un resultado espectacular.
Con más de la mitad de los votos escrutados (1.676.000 sufragios de un total de 2,2 millones de votantes), el candidato de izquierda Rosario Crocetta obtuvo 30,87%, frente al candidato del partido de Berlusconi, Sebastiano Musumeci (24,9%).
El movimiento “Cinco estrellas” del excómico Beppe Grillo, avanzó al 18,01% de los sufragios, según los resultados parciales.
“Es la primera vez que un candidato de izquierda es elegido a la presidencia regional y que gana un candidato antimafia. Esto me parece verdaderamente una cita con la historia, no solo un resultado electoral”, declaró a la prensa Crocetta.
Un candidato atípico
El candidato de izquierda, de 61 años, tiene un perfil atípico para gobernar una de las regiones más importantes y delicadas de la península: homosexual declarado y exalcalde de la siciliana Gela, donde lideró un movimiento contra la mafia, por lo que dispone de protección policial permanente.
Crocetta, vicepresidente de la Comisión Especial Antimafia (Crim) de la Unión Europea, ha militado siempre en movimientos de izquierda y se alió para la gobernación con los centristas de Pierferdinando Casini.
Las elecciones sicilianas son consideradas como un test nacional frente a las elecciones legislativas previstas para la primavera de 2013, donde Berlusconi podría registrar una derrota legendaria.
El malestar de los electores sicilianos resultó evidente tras la divulgación de la tasa de participación en los comicios: el 47,42%, o sea 2,2 millones de electores de los 4,5 millones convocados a las urnas.
Resultados en caída libre con relación a las anteriores elecciones regionales, en 2008, donde la participación fue de 66,68%.
Estas elecciones anticipadas en Sicilia fueron provocadas por la renuncia este verano del gobernador de derecha, Raffaele Lombardo, por acusaciones de clientelismo y por estar coludido con la mafia.
El panorama
Las amenazas de Berlusconi, la derrota en Sicilia y las divisiones dentro de su partido, podrían resultar devastadoras para la carrera política del magnate de las comunicaciones, que tan sólo en el 2008 contaba con el apoyo del 60% de los italianos.