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Un nuevo hecho de inseguridad en pleno centro. Tres delincuentes se llevaron celulares de alta gama valuados en más de $70.000 y dejaron un comercio destruido. Un remisero atestiguó que se trataría de una banda de tres hombres. Los investigadores encontraron huellas dactilares y tomaron muestra de sangre.El hecho se produjo cerca de las dos de la mañana del sábado, el día después del fin del mundo empezaba sin alteraciones. La alarma del local de la empresa telefónica Personal en Mitre 448, en pleno centro salteño, se activó implacable cuando un objeto contundente explotó el vidrio de una puerta. El sistema disparó las llamadas pertinentes a la policía y algunos responsables de la empresa. “Era un desastre. Habían destruido todo. No se puede explicar lo que fue ver nuestro lugar de laburo atacado de esa forma”, dijo Sofía Ortíz Casas, la joven encargada del local, que llegó cerca de la 3.30 de la mañana cuando ya trabajaban oficiales de Criminalística y de la Brigada de Investigaciones. Vidrieras rotas por todos lados, estantes vacíos, sangre, y un sinfín de manchas negras, producto de las huellas dactilares que dejaron los delincuentes y que sin mucho esfuerzo detectaron desde la policía científica. “Hicimos una auditoria y calculamos pérdidas por $70.000, principalmente por el robo de alrededor de 30 equipos de alta gama”, dijo la encargada del local. “Sabían lo que buscaban”, agregaron los investigadores.